La UJC debe ganar más credibilidad entre los jóvenes, influir en su accionar; crear mecanismos más eficientes mediante los cuales se les dé respuesta a sus inquietudes, se conozcan sus criterios
La importancia de que cada joven del país se sienta identificado con la organización y con la obra revolucionaria, en un panorama mundial caracterizado por el recrudecimiento del bloqueo de Estados Unidos, el empleo de las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones en la subversión ideológica y el deterioro de los valores, fue subrayada por Yuniasky Crespo Baquero, primera secretaria del Comité Nacional de la UJC, en el encuentro del Buró Nacional de la organización con el centenar de diputados noveles elegidos en las pasadas elecciones, que durante dos días tendrán un programa de intercambios y visitas en la capital.
La dirigente hizo una caracterización de la juventud cubana de hoy y de los principales desafíos que el país tiene para satisfacer sus intereses y necesidades, basándose en investigaciones realizadas por el Centro de Estudios de Juventud.
El segundo secretario del Comité Nacional de la organización, Yoel Pérez García, expresó que la razón de ser de la UJC no son solo sus militantes y sus dirigentes, sino la juventud cubana toda, esa que defenderá la obra de la Revolución con la palabra y con la acción, y que debe sentirse representada en todos los niveles por quienes un día nos comprometimos a ello.
Yoel, quien abordó la misión de la organización de representar a los niños, adolescentes y jóvenes cubanos, precisó que uno de los pilares en los que se sustenta la UJC es el de propiciar la participación consciente y entusiasta de los jóvenes en la toma de decisiones, sobre todo en el contexto actual, matizado por la actualización del modelo económico.
La organización desarrolla cambios en su estructura interna —agregó el dirigente juvenil—, relacionados con modificaciones en sus documentos rectores, métodos de trabajo, contenidos y con una mayor integralidad en la preparación de los cuadros. Con ello aspiramos a estar más cerca de nuestros jóvenes, sus motivaciones, anhelos y necesidades.
«La UJC debe ganar más credibilidad entre los jóvenes, influir en su accionar; crear mecanismos más eficientes mediante los cuales se les dé respuesta a sus inquietudes, se conozcan sus criterios y se les haga sentir partícipes de la construcción de su presente y su futuro, y con ello garantizaremos su sentido de pertenencia a la organización que reúne a la juventud de vanguardia.
«Los retos crecen a diario para la UJC en nuestro contexto social, porque de los 363 591 militantes con los que contamos hoy, 76 511 son jóvenes asociados a formas de empleo no estatal, y también a ellos debemos dirigirnos y hacerles sentir que sus demandas e intereses son defendidos desde el seno de esta organización», puntualizó.
Trabajar con mayor profundidad desde los comités de base y también en la comunidad, espacio en el que concurren gran número de jóvenes a partir de la reaparición de los institutos preuniversitarios urbanos, por ejemplo, será el eje fundamental alrededor del cual se articule también la labor de la FEU, la FEEM, las Brigadas Técnicas Juveniles, el Movimiento Juvenil Martiano y otras organizaciones, precisó Pérez García.
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