Foto: AFP
El 25 de julio el presidente de Rusia, Vladímir Putin, se ha reunido con el Patriarca de Moscú y toda Rus, Kiril y representantes de otras iglesias ortodoxas locales, los cuales han arribado a la capital rusa para participar en las celebraciones por el 1025 aniversario de la cristianización de Rus. El formato del encuentro en el Kremlin es considerado único, hasta este momento, ningún jefe de estado se había encontrado simultáneamente con tantos representantes de la jerarquía espiritual.
A Moscú han llegado todos los jerarcas de las
quince iglesias ortodoxas que existen actualmente, las cuales unen a
doscientos treinta millones de creyentes por todo el mundo. Estas son,
entre otras, las iglesias ortodoxas de Constantinopla, de Georgia, la
Polaca, la de Jerusalén. Los sacerdotes y la alta jerarquía
intercambiaron con el presidente opiniones sobre los temas cruciales de
la vida de las comunidades ortodoxas, las relaciones inter confesionales
e internacionales, así como sobre la situación espiritual y moral de la
sociedad moderna.
Vladímir Putin declaró que el estado y
la iglesia están juntos en la solución de los problemas más acuciantes.
Felicitando a la jerarquía eclesiástica por el jubileo de esta fecha,
el jefe del gobierno destacó el papel especial que ha jugado la
ortodoxia en la historia del país:
–La
adopción del cristianismo determinó el destino y la elección de la
civilización por donde fue Rus, se convirtió en un momento decisivo, en
un punto de inflexión en la historia del estado, tanto de su parte
religiosa, de la iglesia, como de su parte laica. Los fundamentos
morales de la fe ortodoxa han formado el carácter nacional y la
mentalidad del pueblo, descubrieron sus mejores cualidades creativas,
ayudó a Rusia a ocupar un lugar destacado en la civilización mundial.
Para el estado ruso, para nuestra conciencia nacional, la ortodoxia se
convirtió en su base espiritual, también ha sido capaz de tejer fuertes
lazos que unen a Ucrania, Bielorrusia y Rusia.
El
presidente subrayó que la efeméride por la cristianización de Rus ha
venido acompañada de numerosos actos, tanto laicos como eclesiásticos,
procesiones y conciertos. Uno de estos eventos significativos, que
demuestran la unidad de los pueblos ortodoxos, ha sido la peregrinación a
Ucrania, Rusia y Bielorrusia de uno de los símbolos más sagrados de la
ortodoxia, la cruz del apóstol San Andrés.
Según las
palabras de Putin, Rusia, durante siglos, se forjó y fortaleció como un
estado plurinacional y multiconfesional y ha sacado fuerza y seguridad
en esta variedad. Hoy, este conocimiento y experiencia debe dirigirse
para impedir los conflictos entre distintas civilizaciones:
–Rusia,
con su gran experiencia en la formación y mantenimiento de la paz y la
concordia entre las distintas comunidades confesionales, está lista para
compartirla. Con gran temor y dolor noto que en muchas regiones del
mundo, sobre todo en el Oriente medio y el norte de África, se
multiplican los conflictos y tensiones entre los distintos grupos
religiosos, se menoscaban los derechos de las minorías religiosas, entre
ellas, las cristianas, incluyendo a los ortodoxos cristianos. Considero
que este agudo problema debe ser motivo de un escrutinio minucioso por
parte de la comunidad internacional. Nuestro país seguirá manteniendo
una línea constructiva para la rápida solución política de las
situaciones conflictivas.
El jefe del gobierno
destacó especialmente que tiene la esperanza que estos esfuerzos sean
apoyados por las iglesias ortodoxas locales, más aún cuando millones de
personas confían en la palabra pastoral, en la autoridad y en los
esfuerzos para lograr la paz que hace la iglesia ortodoxa. El patriarca
de Moscú y de toda Rus, Kiril, declaró en relación con esto que las
iglesias ortodoxas del mundo harán un comunicado conjunto sobre la
expulsión de los cristianos de Siria:
–Nosotros
sabemos que en la historia han ocurrido muchas cosas, de cómo se han
expulsado a los cristianos ortodoxos de sus tierras. Hoy, uno de los
resultados de la tragedia que está pasando en Siria, es la terrible
perspectiva de perder la presencia cristiana en este país, y si esto
llegara a ocurrir, entonces, los países colindantes no se quedarían al
margen. No podemos permitir la devastación del Medio oriente desde el
punto de vista de la eliminación de la presencia del cristianismo en
esta tierra, eso sería una catástrofe de la civilización. Nuestras
raíces están en esa tierra, allí nació nuestra fe.
El
guía espiritual de la Iglesia ortodoxa de Alejandría, Teodoro II, está
convencido que la cristianización del pueblo ruso ha determinado el
camino histórico de la nación:
–La
adopción de la fe y la riqueza de la tradición nacional, realizada con
la Cristianización dirigida por el sagrado y apostólico príncipe
Vladímir, se convirtió en una sólida base donde se formó el espíritu
ruso. Al pasar por el crisol de la prueba, el hombre ruso nunca ha
tenido miedo a sacrificar su “yo” en nombre de un común “nosotros”,
inscribiendo en el libro de la historia páginas doradas de heroísmo y
sacrificio.
Ya el próximo sábado, 27 de julio,
el presidente de Rusia, Vladímir Putin, y el patriarca de Moscú y toda
Rus, Kiril, visitarán la capital de Ucrania, Kiev, donde se celebrarán
las solemnes ceremonias dedicadas al aniversario mil veinticinco de la
Cristianización de la gran Rus. Precisamente aquí, en el año 988,
ocurrió este evento que se ha convertido en un punto de partida en la
historia de todo el cristianismo oriental.
No hay comentarios:
Publicar un comentario