Los camaradas Jaruzelski y Kania quienes tuvieron el honor de dirigir la victoria obrera y revolucionaria de 1981.
Un factor decisivo de la victoria frente al trosko-fascismo-imperialismo fue que en la dirección soviética había verdaderos camaradas como Breznev y no traidores como Gorbachov
Mientras la contrarrevolución vaticanista juzga a 6 camaradas dirigentes del Estado socialista polaco y del Partido Obrero Unificado de Polonia (POUP) por el "delito" de haber aplastado el fascismo encarnado en el sindicato amarillo-troskista Solidarnosc, nosotros queremos reivindicar esto que fue la última gran victoria política y militar de la clase obrera polaca, su Estado y su Partido frente al fascismo. Mediante la declaración del Estado de urgencia, el Estado revolucionario apoyado por todo el campo socialista, pudo aplastar esa organización criminal apoyada por la CIA, el troskismo y el Vaticano y preservar el socialismo hasta 1989 cuando el traidor Gorbachov obligó al POUP a rendirse incondicionalmente y entregar el poder a los enemigos de la Patria polaca que habían sido derrotados en 1981. Honor y gloria a los comunistas polacos, a las fuerzas de seguridad encargadas de preservar el socialismo y a la clase obrera polaca que se mantuvo fiel pero que sufrió fuertemente la contrarrevolución cuando los falsos "obreros" liderados por el fascista Walesa llegaron al poder.
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