El agradecimiento de un salvadoreño

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Posted: 23 Aug 2013 06:30 AM PDT

Durante mi visita a California, Estados Unidos, comprendí que el amor a la familia y a la patria, impulsan los grandes cambios para El Salvador

El día en que participé del hermanamiento entre el municipio de San Pedro Masahuat y la ciudad de Watsonville, en California, tuve la oportunidad de saludar y compartir con los compatriotas que radican en esa localidad. Entre fotos y estrechadas de manos, conversé con algunos salvadoreños, cuyas palabras me sirvieron de inspiración para esta publicación.
Me hicieron saber que desde hace varios años no visitan a sus familias en El Salvador, algunos por razones laborales y otros por cuestiones presupuestarias, ya que los altos costos de los pasajes aéreos les impiden viajar con sus familias a la tierra que les vio nacer.
Cuando me disponía a irme del lugar, una persona, de quien honestamente no recuerdo su nombre, me dijo: “profesor, lo felicito y le agradezco por el programa de entrega de uniformes y zapatos en El Salvador, a unos sobrinos míos se los dan”.
El agradecimiento que me hizo ese salvadoreño me hizo pensar en cómo nuestras acciones han ayudado a la población. No imaginé que aquel compatriota pudiera agradecerme por eso, sus palabras me demostraron que nuestra gente reconoce los programas que estamos implementando y que desean su continuidad.
En cualquier parte del mundo que uno encuentre salvadoreños y salvadoreñas se quedará impresionado por el profundo amor que profesan por su tierra que les vio nacer. Siempre están viendo hacia acá, queriendo saber qué cosas están mejorando, buscando maneras de ayudar.
Por supuesto le hice saber a nuestro hermano que mi compromiso es profundizar todos los cambios que hemos comenzado. Además le manifesté que así como trabajamos día a día, sin descanso, por construir y alcanzar el Buen Vivir en El Salvador, lo haremos enfocando nuestro interés hacia la comunidad de salvadoreños en el exterior.
Al amigo que felicitó y agradeció la entrega de uniformes y zapatos, le dije que nuestra meta es gobernar en beneficio de las familias salvadoreñas, tanto dentro como fuera del país; ante la comunidad de salvadoreños, me comprometí  a promover una atención consular más eficiente y cercana, gestionar una política que nos ayude a bajar los costos de los pasajes aéreos, trabajar constantemente para la extensión del TPS,  entre otras medidas pensadas para atender las necesidades de todos nuestros connacionales.
Ya lo he señalado, la riqueza más grande de El Salvador es su gente, y por esa gente laboriosa que hace grande a este país, vamos todos adelante.