Posted: 26 May 2014 06:30 AM PDT
Algo que he tenido muy presente en todo el
proceso de transición y selección de mi gabinete es el compromiso de
ser un gobierno que abre espacios de comunicación con la gente. Esta
característica la encuentro en cada uno de los funcionarios que he
designado para trabajar junto al pueblo durante los próximos cinco años.
Mi experiencia como luchador social,
diputado, ministro y vicepresidente de la República, me ha enseñado que
el ejercicio público debe estar basado en la honestidad, la
transparencia, la austeridad y el diálogo permanente con los diferentes
actores de la ciudadanía. Esos son los principios que los salvadoreños
encontrarán en nuestra gestión. Es mi compromiso.
El masivo pronunciamiento de los
salvadoreños que, desde sus casas, comunidades, asambleas sectoriales y
la diáspora, generó las propuestas que de nuestro programa de gobierno,
fue la confirmación de un pueblo dispuesto a forjar un mejor país. Un
país donde gobierno y ciudadanos trabajan juntos. Ante la determinación
de nuestra gente, mi posición sigue siendo firme: ¡gobernaremos desde
los territorios y no desde los escritorios!
Nuestra propuesta es eliminar todas las
absurdas distancias que suelen existir entre servidores públicos y la
ciudadanía. En el pasado ha quedado el viejo accionar de gobiernos
inaccesibles que marginaron sobre todo a los más pobres. Ahora los
salvadoreños tenemos la ventaja de tener un gobierno dialogante que se
propone hacer de la participación ciudadana su principal característica.
Desde hoy declaramos que El Salvador será
un lugar donde se favorezca el libre debate de ideas, sin perder tiempo
en pleitos que históricamente han estancado el camino de las soluciones a
los grandes problemas que enfrentamos. El desarrollo social y económico
de El Salvador estará sustentado en las líneas abiertas a las
iniciativas ciudadanas y a la participación de todos los sectores en los
temas de país.
Mi vida ha sido una constante lucha por la
reivindicación de nuestro pueblo. Llegar ahora a la silla presidencial
significa para mí darle a los salvadoreños la oportunidad que siempre ha
esperado de construir con sus manos un mejor presente y futuro.
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