Los padres entierran a sus hijos
No leas diarios, no veas tv., no oigas la radio. Los medios están enfermos. Su propaganda es parte del problema.
Es un rio de sangre que no parece tener final y si desemboca en el mar, también ese mar ya está manchado con la sangre de tanta gente asesinada a lo largo y ancho de la patria.
Duro para todo mundo. Para el gobierno por llevar la carga producto de variables que no parecen tener solución, para la ciudadanía que a diario ve a sus hermanos y hermanas morir sin causas que no pueden ser justificadas por nada, que no tienen razón ni justificación alguna.
Para la iglesia por porque muy a pesar de su esfuerzo las ovejas siguen descarriadas, para los maestros que ven frustrados todo el esfuerzo cotidiano de la escuela.
Violencia Maldita Violencia, serpiente venenosa atacando todos nuestros hogares.
Lección para políticos: No se puede gobernar sobre las cenizas de la ciudadanía.
Lección para la ciudadanía: No podemos pensar que los políticos y el gobierno a solas va a resolver el problema, es deber de todos y de todas el buscar el camino para detener los horrores de esta nación sin ley.
Sabemos bien que es un mal heredado, pero de nada sirve acusar al pasado ni hacer señalamientos irresponsables al actual gobierno, se deben de lanzar Campañas por la Paz a nivel nacional, auxiliarse en los deportes, la escuela, la iglesia, la cultura para organizarnos en Cruzadas Nacionales Por La Paz
No es cosa de que nos guste o no, es una necesidad tratar de detener este cotidiano río de sangre que enluta a la patria a toda hora y en todos los ámbitos.
Si buscamos los orígenes de nuestra situación la podremos encontrar en muchos lados: la corrupción que ha sido la ley de muchas administraciones anteriores y que ahora aunque se luche contra ella, está presente por todos lados ya que no se pueden sanar heridas profundas con un velo de deseos, sino con acciones coordinadas, los encontramos en la economía, en la injusta distribución de la riqueza de la nación que fueron las causas de la guerra, en la guerra misma, en la migración de salvadoreños hacia tierras extrañas donde han sido tratados peor que a los animales, en las deportaciones, en el narco tráfico, en los medios de comunicación, en la corrupción del sistema judicial, en nuestros hogares, en nuestras escuelas, en nuestra cultura, en fin en nuestra salvadoreñidad de la cual todos somos responsables y como tales es deber de toda la ciudadanía el apoyar al gobierno y a toda institución que busque solucionar el problema que afecta a toda la nación.
Luchemos por quitarnos ese mote de la nación más violenta de América Latina, sembremos para no ser los más deforestados después de Haití, luchemos porque nuestra infancia y juventud sean el futuro de esta nación de todos, nosotros ya vivimos y de suerte estamos medio vivos, no sigamos permitiendo que nuestra patria se convierta en una nación de decrépitos ancianos, sino de una juventud ferviente y productora, de una infancia feliz y de ancianos que sean como los sacerdotes nativos quienes se ganaban el respeto merecido.
Una nación capaz de producir lo que consumimos y nos deje márgenes para la exportación, una nación productiva en todos los campos, una patria formada por hombres y mujeres forjados en la fraternidad y el trabajo comunitario, por ello es que debemos luchar no para estarnos comiendo unos a otros.
Me gusta ver losa cambios, el agua llegando a todos los rincones de la patria, me gusta ver nuevas casas para los más necesitados, el trabajo de las alcaldías en beneficio de la población, nuevos caminos y carreteras siendo construidas, puentes levantados, a Protección Civil cumpliendo su trabajo, Gobernación haciendo trabajo ciudadano a lo largo de la nación, SECULTURA renaciendo, a nuestros niños bien uniformaditos con sus zapatitos y útiles yendo felices hacia las escuelas donde les espera también su alimentación, a la población con sus médicos, enfermeras y promotoras de salud, a la infancia y juventud haciendo deportes, a miles de campesinos trabajando sus lotecitos propios y bueno a la gente de las comunidades recibiendo sus escrituras de sus pedacitos de tierra, que es su vida.
La violencia crece, crecen los feminicidios, muertos por todos lados y mientras el Ministerio de Justicia y Seguridad no golpee a los cabecillas del narcotráfico, de poco o nada sirve que combatan el menudeo de drogas, lo cual no significa que no se hagan esfuerzos ya que en todo el mundo es conocido que mientras los de nariz blanca sigan con su consumo imparable loa producción y exportación seguirá subiendo, siendo nosotros los países que estamos en el camino, los que pagamos el pato. Me pregunto: Cómo es que en un país como los Estados Unidos con la tecnología más avanzada y el ejército más poderoso del mundo, sean incapaces de detener el flujo permanente de drogas en sus fronteras puertos marítimos y aéreos? No será ese en problema principal?
Para nuestro gobierno el siguiente consejo: César le preguntó a Macchiavello: Maestro, cómo hacemos para traer gente honrada al Senado? Ese no es el problema, el problema es cómo mantener honrados a los que están.
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