Anastacio Mártir Aquino (Santiago Nonualco, 15 de abril de 1792- San Vicente, 24 de julio de 18 fue un líder indígenainsurrección de los nonualcos salvadoreño que encabezó la , un levantamiento campesino en El Salvador durante la existencia de la República Federal de Centro América. Nació en el seno de una familia que pertenecía al linaje de los Taytes (Caciques) de la etnia de los Nonualcos, pueblo indígena que ocupaba el actual territorio del departamento de La Paz. Después de la independencia de los países centroamericanos de España en 1821, se formó una federación (1824) que tuvo una difícil existencia. Los encuentros entre liberales y conservadores, entre los caudillos locales, la falta de recursos y una organización precaria, entre otros, eran caldo de cultivo de violencia a lo largo y lo ancho del istmo.
La necesidad de llevar recursos al Estado obligaba a aplicar una serie de medidas económicas que eran de total desagrado a las mayorías, entre ellas los tributos y expropiaciones. Esta última, especialmente, golpeaba a los llamados indígenas que durante la época colonial al menos tenían asegurada una parcela de tierra. Así, este grupo, que ya desde los primeros años de la llegada de los españoles se encontraba en desventaja dentro de la organización social, lo estaba aún más debido a la agitación de los primeros años de independencia.
El gobierno de El Salvador tuvo que implementar medidas antipopulares en 1832, tales como una contribución directa sobre la propiedad inmueble y sobre la renta. También el constante reclutamiento forzoso era de desagrado general. El descontento se desató. La proliferación de alzamientos populares y asaltos a cuarteles eran frecuentes, la principal de ellas fue en San Miguel. Hubo otros intentos en Chalatenango, Izalco y Sonsonate que fueron controlados.[2
La rebelión
Fue en Santiago Nonualco donde se realizó el principal alzamiento a comienzos de 1833. Allí Aquino exhortaba a desobedecer al gobierno. A finales de enero logró reunir un ejército de proporciones suficientes para dar batalla, es probable que reuniera 3,000 hombres. El comandante de la vecina ciudad de San Vicente, (J.J. Guzmán), recibió órdenes de sofocar la rebelión, pero en el primer intento terminó emboscado. Otro ataque, realizado el 5 de febrero, también fracasó. Al tener noticia de esta última derrota el comandante Guzmán huyó.
Mientras tanto, en la ciudad capital de San Salvador, el jefe político Mariano Prado al verse incapaz de sostener la situación depositó el poder en el Vice- Jefe Joaquín San Martín. Ante este nombramiento hubo descontento entre las filas militares por lo que la tropa abandonó la ciudad; ésta quedó sumida en el caos, y el mismo San Martín tuvo que resguardarse para salvar su vida. Aquino no supo de este desorden que reinaba en la capital, de saberlo, la ocupación no hubiera sido difícil. Con Zacatecoluca tomada, decidió partir a la vecina San Vicente el dia 14 de febrero, los vecinos de la ciudad se apresuraron a resguardar todo objeto de valor. Con dos tropas —una al mando de su hermano y otra de un amigo— arribó la madrugada del dia 15 bajo condiciones amigables pues los habitantes preferían no enfrentarlo.
Tuvo la intención de quemar la ciudad por haber recibido los primeros ataques desde ahí, pero desistió bajo la intervención de un antiguo amo para el cual había servido.[5] Aquino fue nombrado por sus parciales como Jefe Político de San Vicente, pero ni con esto pudo impedir un saqueo general a la ciudad. De acuerdo a la tradición popular Aquino se dirigió a la Iglesia de El Pilar y, después de quitarle la corona a la imagen de san José se la colocó en su propia cabeza y se proclamó como Rey de los Nonualcos.
En Tepetitán se le proclamó "Comandante General de las Armas Libertadoras", y proclamó su Decreto de Tepetitán el 16 de febrero. En él regulaba con duras penas el homicidio, robo y vagancia, entre otros; además, tenia un apartado para la protección de las mujeres casadas o recogidas, apartado destacable por la situación de desventaja en que se encontraba la mujer en esa época. Mientras, el Gobierno trató de llegar a un acercamiento con el sublevado para que depusiera sus armas por medio de dos sacerdotes; sólo uno de ellos (J. Navarro) tuvo contacto con él, pero no obtuvo resultados.
Al fin las autoridades lograron reunir un ejército para enfrenar a Aquino, a quien se agregaron habitantes de San Vicente para vengar el saqueo. Uno de los comandantes —Mayor C. Cuellar— quiso enfrentar por sí solo al rebelde pero salió derrotado; de acuerdo al folclore Aquino se le abalanzó al grito de "treinta arriba, treinta abajo, y adentro Santiagueños" que probablemente se refería al lugar que ocupaban sus tropas al momento del ataque. En la mañana del 29 de febrero se libró la batalla decisiva en Santiago Nonualco. Al mismo tiempo, aparentemente los sublevados estaban diezmados por una enfermedad. Así, que aprovechando esto, el coronel J. López mandó un ataque general que dispersó a los insurrectos. No se logró la captura de Aquino.
Para atrapar al rebelde se propuso perdón a las vidas de quienes revelaran su paradero y entregarlo . A pesar de que hubo negativa de sus parciales, hubo uno que lo traicionó y fue capturado el 23 de abril. Se trasladó a Zacatecoluca donde fue juzgado y condenado a muerte, en San Vicente se ejecutó la pena. Fue decapitado y su cabeza colocada en una jaula con el rótulo: "ejemplo de revoltosos".
Asimismo, después de la rebelión, se hicieron populares unos versos cuyas primeras líneas son:
El indio Anastasio Aquino
Le mandó decir a Prado,
que no peleara jamás
Contra el pueblo de Santiago.
Aquino lo dijo así,
Tan feo el indio pero vení
También le mandó decir
Que los indios mandarían
Porque este país era de ellos
Como el mismo lo sabía
Aquino lo dijo así,
Tan feo el indio pero vení...
Desde el siglo XX ha sido tomado como un símbolo de rebeldía y libertad por parte de los sectores políticos de izquierda.
PARTE DE NUESTRA HISTORIA
Oficialmente adoptado el 15 de septiembre de 1912, junto con Bandera azul y Blanco de la Federación, el Escudo de El Salvador tiene las siguientes figuras:
Un Triángulo equilátero:
En la base del triángulo una cordillera formada por cinco volcanes, bañan la cordillera las aguas de dos mares.
En la parte superior del triángulo, un arco iris;
Bajo el arco iris, el gorro frigio de color encarnado, esparciendo luces; sobre las luces, en semicírculo, la leyenda 15 DE SEPTIEMBRE DE 1821.
Alrededor del triangulo, en letras de oro las palabras REPÚBLICA DE EL SALVADOR EN LA AMÉRICA CENTRAL.
En la base del triángulo, la leyenda DIOS UNIÓN LIBERTAD, a cada lado del triángulo, dos banderas una con dos franjas azules y una blanca en el centro, que se entrelazan en la mitad de la base del triángulo, y una bandera igual en el vértice superior. Todas en asta que termina en una lanza; y dos ramos de laurel entrelazados en forma circular, que termina en las dos banderas laterales superiores, cada uno con siete gajos.
El triángulo indica que todos somos iguales ante la ley; los ángulos, los tres poderes del Gobierno: Legislativo, Ejecutivo y Judicial.
En la Cordillera están representadas la naturaleza volcánica de nuestro suelo y las cinco naciones que forman centro América.
Los dos mares son el Atlántico y el Pacífico, que bañan las costas centroamericanas.
El arco iris es símbolo de paz
El gorro frigio proclama la libertad y los rayos luminosos que lo rodean, los ideales del pueblo salvadoreño. La leyenda puesta sobre el espacio luminoso indica la fecha de nuestra emancipación política. Nuestra condición de miembros de una sola patria, la Centroamericana está expresada en la leyenda del rededor. Las palabras colocadas al pie indican nuestra creencia en un Ser Supremo, la armonía que debe reinar en la familia salvadoreña y el principio de independencia que nos rige en el pensamiento, la palabra y la acción.Las cinco banderas representan a las cinco naciones Centroamericas.
En los ramos de laurel está simbolizada la gloria que debemos conquistar en todos los aspectos de la actividad humana.Por último, los 14 gajos representan los 14 departamentos en que administrativamente se divide la república de El Salvador.
El diseño original del escudo pertenece al calígrafo salvadoreño Rafael Barraza Rodríguez, quien venció en el concurso promovido al efecto por el Ministerio de Guerra y Marina. Tuvo treinta competidores. No satisfecho con las bases del certamen,el señor Barraza Rodríguez le agregó al Escudo los cinco pabellones de El Salvador que rodean al triángulo y los dos ramos de laurel que abarcan el conjunto.Un decreto de la Asamblea Nacional, emitido el 20 de marzo de 1916 y publicado en el Diario Oficial siete días después, le dió fuerza de ley a las dos insignias agregadas. Presidía el Congreso don J. M. Batres; Presidente de la República era don Carlos Meléndez, y Ministro de Guerra el doctor Enrique Córdova.
Los Originales del Escudo elaborado por el señor Rodríguez Barraza, uno en negro y otro en colores, fueron exhibidos en las vitrinas de Ferretería Sagrera, de la capital, varios días del mes de agosto de 1912, junto con los trabajos de los demás concursantes.
Refiere un cronista que frente a la exhibición comenzó a desfilar público capitalino "y todas las miradas se detenían con insistencia en el escudo de los laureles y los pabellones"
La ley ordena que el Escudo sea colocado en todos los puertos y oficinas públicas. Lo Llevarán con todos sus emblemas: El gran sello de la Nación, el sello de la Secretaría de la Asamblea Nacional, el de agente del Gobierno y los Tribunales de Justicia.
También podrá usarse el Escudo en los muebles o vehículos de propiedad nacional, en el papel de la correspondencia de los Supremos Poderes del Estado y por las personas o instituciones particulares en cada fiesta o duelos nacionales. El poder Ejecutivo podrá también autorizar el uso del Escudo, a condición de que no lleve las leyendas "República de El Salvador en la América Central" y" Dios Unión Libertad", tampoco los ramos de laurel.Los pabellones del rededor se pueden suprimir a voluntad.
Las personas que usaren u ordenaren el uso del Escudo en forma y manera distinta a las que prescribe la ley, serán castigadas gubernativante con una multa de cincuenta colones por cada infracción.
En la misma fecha en que fue cambiada la Bandera Federal también se modificó el Escudo de Armas de El Salvador. El Decreto está fechado el 20 de abril de 1865, el 18 de mayo siguiente lo publicaba el periódico " El Faro".De conformidad con este Decreto el Escudo esta colocado en un medallón redondo con los bordes de color caoba.
En el espacio inferior del escudo, un volcán semejante al Izalco en espacio superior, 9 estrellas en semicírculo que representan los nueve de departamentos de aquel año.
A ambos lados del Escudo descienden dos cuernos de abundancia derraman flores y frutos del país. De la unión de los cuernos arranca un vertical que sostiene un gorro frigio.
El Escudo está limitado por una faja circular en donde se leen palabras: REPÚBLICA DEL SALVADOR EN LA AMÉRICA CENTRAL, arriba y en forma de semicírculo, la frase 15 DE SEPTIEMBRE DE 1821 en letras negras entre rayos luminosos y con el gorro frigio en el centro.
Las banderas sirven de fondo, en la parte inferior, a un carcaj de color caoba, colocado diagonalmente de derecha a izquierda; las plumas color que contiene, tocan la parte inferior derecha del Escudo. Cruzando el carcaj, de izquierda a derecha, en forma de letra X un arco de color caoba, con la cuerda floja; mas abajo paralela al arco.
Flecha. Detrás del carcaj y en su intersección con el arco, arranca una palma verde con hojas gladioladas que se extienden hacia un lado y otro en forma semicircular y hacia arriba, hasta el pie del volcán, sirviendo de orla a la extremidad de las banderas.
El medallón tiene por marco una faja blanca en cuya parte inferior hay dos ramilletes enlazados, de laurel verde, que quedan debajo del carcaj y de las palmas.
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