ENTREMESES POLTÍCOS

Cuando todas las partes de cualquier gobierno están de acuerdo que están en desacuerdo es que las cosas posiblemente andan bien; pero cuando todas las mismas están de acuerdo es peligroso ya que puede ser obediencia vertical o podría ser que todos están de acuerdo que todo marcha mal y que por lo tal el acuerdo unánime es estar de acuerdo en no informar a la ciudadanía.Lo que es verdad para alguien puede ser mentira para otro y todavía hay que ver si es verdad sintética o analítica y en política, siendo la ciencia de las posibilidades los hechos tienen que probarse empíricamente por medio de observaciones que produzcan resultantes objetivas y no por especulación que es lo que se está propagando más que todo en la relación del gobierno salvadoreño y el partido FMLN, especulaciones que la mayoría de veces y por su naturaleza no pasan de ser eso, especulaciones.
Un gobierno que en el corto tiempo ha hecho lo que ha hecho significa que está marchando bien y en nuestro país es bastante lo que se está haciendo y más que todo por iniciativa presidencial y de algunos ministros de su gabinete, por lo tanto es subjetivo estar haciendo criticas sin hacer la observación anterior. Hay que mencionar los adelantos y que los críticos del mismo nos den los ejemplos de gobiernos anteriores para que nos convenzan de lo contrario: se están haciendo cuarenta mil casas para gente pobre, se están dando dos millones de uniformes, útiles escolares y comida al estudiantado, se está dando cuatrocientos dólares a los estudiantes de bachillerato en zonas de extrema pobreza, se han repartido más de seis mil títulos de tierra, se eliminaron las cuotas hospitalarias y se compra medicina fresca, al mismo tiempo que se construyen hospitales y nuevas clínicas, se está dando la pensión a la tercera edad y se resuelve el
problema de los lisiados de guerra, se construyen nuevas carreteras y se reparan las deterioradas, se dio una respuesta inmediata a los problemas causados por el derrumbe del volcán de San Vicente, se aumenta el presupuesto a la Universidad Nacional y se aprueba la construcción de cuatro facultades multidisciplinarias o institutos técnico-científicos, se comienza con la alfabetización a nivel nacional, se rebajan las cuotas telefónicas y se reorientan los medios de comunicación estatal, se organiza el trabajo de los presidiarios introduciendo el programa de fabricación de material deportivo en las cárceles de la nación, se pide perdón en nombre del estado el asesinato de Monseñor Romero, se facilita el proceso en el extranjero para criminales salvadoreños que tenían cobertura gubernamental, se demanda a la Fuerza Armada que abra los archivos de guerra, se impulsa la democratización de los deportes para toda la ciudadanía, se repara
la infra estructura deportiva arruinada por falta de uso por las administraciones anteriores y se abren al pueblo, se impulsa la micro y mediana empresa tanto agrícola como industrial se abren nuevas relaciones de mercado a nivel internacional, poco a poco se va cambiando el mugroso cuerpo de diplomaniáticos y en este momento se da a conocer un nuevo plan de seguridad nacional. Personalmente, como un ciudadano objetivo a quien no lo limitan puestos o salarios, considero que en ocho meses o lo que lleva de tiempo el gobierno actual se ha hecho mucho más de lo que hicieron los gobiernos anteriores en una infinidad de tiempo. Como respuesta, de seguridad recibiré criticas malsanas por mi posición, sencillamente deseo recordarles que trabajo voluntariamente en varios departamentos y que mi trabajo es objetivo y no hipotético y mis escritos son reales y no especulativos y que a muchos de los críticos nunca se les ha visto trabajando para el
pueblo, menos en forma voluntaria.
Es obvio pensar que las relaciones políticas entre el partido y el presidente no son ni pueden ser relaciones de amor, sino relaciones de gobierno y partido y por lo tanto; relaciones simbióticas de necesidad y que muchos de los críticos son las ratas que saltaron al charco cuando el barco arenero se hundió y como lobos solitarios están en todo su derecho a ladrar. Sin embargo, hay diferencias en la visión como hacer las cosas; pero al mismo tiempo hay que señalar que los tres poderes del estado tienen sus obligaciones y tareas demarcadas y que como pueblo tenemos el derecho y obligación a sugerir y demandar al gobierno lo mejor que se pueda en la conducción de los destinos de la patria.
Es sugerente decir que nada bueno puede resultar de intra pleitos, que hay que ser más visionarios y trabajar junto al pueblo de forma incondicional y que mientras más perdamos tiempo en discusiones vanas sin sentido, la víbora enemiga se desliza con las fauces abiertas lista para lanzar la tarascada.

PAUL FORTIS