La justicia boliviana descubre que un traidor del Ejército Popular Húngaro y agente de la CIA era el jefe del intento de matar al presidente Evo
Es seguro que de haber coincidido en el tiempo la gloriosa República Popular húngara y el Estado multinacional boliviano hubiesen sido estrechos camaradas de lucha por un Mundo sin opresión ni guerras ni imperialismo. Pero la lucha sigue. Viva Evo Morales!!!!
Fidel y Rafael Rodriguez junto a oficiales de la RDA y la URSS. El Pacto de Varsovia y la Revolución en América Latina fueron aliados estrechos.
El ex coronel de los servicios de inteligencia de la Hungría Popular Istvan Belovai, quien de 1974 a 1988 estuvo pasando información secreta a la CIA, era el jefe estratégico del comando terrorista formado por fascistas croatas y húngaros que fue desmantelado por la seguridad boliviana y que tenía como objeto asesinar al presidente Evo Morales. Este traidor fue expulsado del Ejército y condenado a cadena perpetua y lamentablemente no fue fusilado por la Hungría Popular. La contrarrevolución lo liberó en 1990 dedicándose inmediatamente a cometer actos criminales contra los pueblos. Participó en la guerra civil en Yugoslavia donde conoció al fascista croata Rozsa Flores que hizo sus armas matando comunistas y población civil, jefe del comando operativo desmantelado en Santa Cruz, Bolivia en abril de 2009. Belovai era un agente activo de la CIA residente en los USA.
El hijo de criminales ustachis croata y oligarca boliviano jefe de la contrarrevolución Branko Marinkovic financió el comando terrorista con al menos 200 mil dólares y hoy se encuentra refugiado en la patria del terrorismo internacional, EEUU.
Rozsa Flores se reportaba periódicamente con Belovai. En el operativo boliviano fue liquidado Rozsa Flores y el terrorista húngaro-rumano Arpad Magyarosi siendo capturados el húngaro Elod Toásó y el boliviano con pasaporte croata Mario Francisco Tadic.
La conclusión política es clara: la "democratización" de Europa del Este, es decir la restauración capitalista ha hecho de esa región un foco infeccioso de fascismo, agresiones, guerras, terrorismo, destrucción social y bases operativas de la CIA que amenaza a sus pueblos y a toda la Humanidad. El proceso democrático antimperialista boliviano sufre en estos momentos las consecuencias de la contrarrevolución europea controlada por el imperialismo. La Humanidad necesita que las fuerzas democráticas, revolucionarias y obreras recuperen el poder en Europa del Este y expulsen a los agentes contrarrevolucionarios.
El hijo de criminales ustachis croata y oligarca boliviano jefe de la contrarrevolución Branko Marinkovic financió el comando terrorista con al menos 200 mil dólares y hoy se encuentra refugiado en la patria del terrorismo internacional, EEUU.
Rozsa Flores se reportaba periódicamente con Belovai. En el operativo boliviano fue liquidado Rozsa Flores y el terrorista húngaro-rumano Arpad Magyarosi siendo capturados el húngaro Elod Toásó y el boliviano con pasaporte croata Mario Francisco Tadic.
La conclusión política es clara: la "democratización" de Europa del Este, es decir la restauración capitalista ha hecho de esa región un foco infeccioso de fascismo, agresiones, guerras, terrorismo, destrucción social y bases operativas de la CIA que amenaza a sus pueblos y a toda la Humanidad. El proceso democrático antimperialista boliviano sufre en estos momentos las consecuencias de la contrarrevolución europea controlada por el imperialismo. La Humanidad necesita que las fuerzas democráticas, revolucionarias y obreras recuperen el poder en Europa del Este y expulsen a los agentes contrarrevolucionarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario