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Al propio tiempo, Yulia Timoshenko ya no podrá participar en la política ucraniana en un futuro próximo.
Tras la declaración hecha por el presidente ucraniano, Víktor Yanukóvich,
quedó claro que en la vida de Yulia Timoshenko llegó el momento
crucial. El jefe de Estado declaró que está dispuesto a dejar en
libertad a la exprimera ministra para que pueda someterse a un
tratamiento en Alemania. Ya se está elaborando el correspondiente
proyecto de ley. No obstante, añadió Yanukóvich, la decisión definitiva
sobre el particular deberán tomarla los diputados de la Rada Suprema
(Parlamento de Ucrania):
–Si
el Parlamento aprueba la ley, yo la firmaré. ¿Qué mecanismos se
implantarán más adelante? Lo más probable es que un tribunal decida el
orden de salida, el mantenimiento de ciertas garantías, etc.
Hace
ya tiempo que el “caso Timoshenko” contamina las relaciones entre Kíev y
Bruselas. Europa considera a la exprimera ministra presa política y
supone que en la cárcel no cuenta con la debida atención médica. El
cambio de postura de Víktor Yanukóvich sobre el particular obedece a la
aproximación de la fecha de celebración de la cumbre de la Asociación
Oriental, en la que Ucrania tiene previsto firmar el acuerdo de
asociación con la UE. Bruselas dio a entender más de una vez que el
“caso Timoshenko” entorpece el acercamiento entre Ucrania y la Unión
Europea, afirma el experto del Instituto de Estudios Internacionales de
la Cancillería rusa, Leonid Gúsev:
–Yo
mismo contacté con representantes de las embajadas holandesa y sueca
tras el encarcelamiento de Yulia Timoshenko. Y ya entonces ellos decían
que el asunto de las relaciones entre la Unión Europea y Ucrania será
uno de los más importantes. Por eso el hecho de que todo el tiempo
insistían e siguen insistiendo en su liberación en cierta magnitud
constante.
Los
detalles del compromiso alcanzado entre Kíev y Bruselas se mantienen en
secreto. Sn embargo, algunos de ellos los reveló en su blog el
eurodiputado polaco Marek Siwiec. Según él, Yanukóvich recortará el
plazo de prisión de Timoshenko de siete a tres años y medio. Esto le
permite a ella solicitar la libertad condicional anticipada. Al propio
tiempo, Timoshenko aún se verá obligada a pagar una multa
multimillonaria. Por lo demás, es probable que si viaja a someterse al
tratamiento médico podrá eludir ese pago. En tal caso, su salida será
tramitada como provisional. Para las autoridades ucranianas será incluso
beneficioso si Timoshenko se queda en el extranjero, negándose a pagar
la multa, pues ya no podrá participar activamente en la vida política en
su patria. La situación es comentada por la vicedirectora del Instituto
ruso de Estudios Estratégicos, Tamara Guzenkova:
–Formalmente
se trata de que Yulia Timoshenko recobra la libertad a los efectos de
viajar a Alemania para mejorar su estado de salud. Una de las
condiciones en que insiste Ucrania consiste en que Timoshenko bajo
ningún concepto podrá dedicarse a la política y no deberá, como los
bolcheviques del exterior, encabezar un proceso revolucionario en su
patria. Ella deberá ser solo una paciente que sigue un tratamiento para
mejorar su salud.
La
sentencia acusatoria le fue dictada en octubre de 2011. Fue reconocida
culpable de abuso de poder durante el cierre de un acuerdo con Rusia
para el suministro y tránsito de gas. El tribunal estimó que el proceder
de Timoshenko hizo perder a Ucrania aproximadamente 189,5 millones de
dólares. Por eso fue condenada a siete años de prisión y a una multa
igual a la suma del daño ocasionado al Estado. Por otra parte, se le
prohibió en el curso de tres años tras su liberación ocupar determinados
cargos en los organismos del poder. En Occidente consideran que el
tribunal tomó tal resolución bajo la presión de Víktor Yanukóvich, quien
de esta manera se libró de una rival peligrosa.
mj/kg/er
Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción de La Voz de Rusia.
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