Como auguraba
Salvador Allende en su discurso ante la ONU en 1972: “Estamos ante un
verdadero conflicto frontal entre las grandes corporaciones
transnacionales y los Estados. Estos aparecen interferidos en sus
decisiones fundamentales -políticas, económicas y militares- por
organizaciones globales que no dependen de ningún estado y que en la
suma de sus actividades no responden ni están fiscalizadas por ningún
Parlamento, por ninguna institución representativa del interés
colectivo”. Cuarenta años después dicho discurso conserva total
vigencia.
Actualmente, encima de los estados nacionales, se ha
impuesto el poder de las empresas transnacionales, son quienes
concentran el capital a gran escala en sus diversas formas: productivo,
comercial y financiero; son quienes manejan a las instituciones
internacionales y quienes subordinan las políticas de los estados.
Es
en la década de los ochenta, con la entrada del neoliberalismo en
América Latina, cuando se empieza a instaurar un mercado mundial en el
que pudiesen circular libremente los capitales financieros, comerciales y
productivos. La necesidad del mismo sistema capitalista de enfrentar la
crisis estructural de la década de los 70´s creó las condiciones para
establecer el nuevo orden económico mundial. Las empresas
transnacionales aparecían como los sujetos activos en dicha
globalización neoliberal, éstas tenían como fin la deslocalización de
los procesos productivos para poder así disminuir los costos de las
materias primas y de mano de obra, y gozar de exenciones fiscales en los
diferentes países donde penetraran. Las empresas transnacionales, con
la ayuda de organismos internacionales como el Fondo Monetario
Internacional (FMI) y del Banco Mundial (BM), buscaban contrarrestar la
tendencia decreciente de la tasa de ganancia y asegurar la acumulación
de capital a escala planetaria, lo cual se puede evidenciar al analizar
el tipo de condicionalidades impuestas a los países periféricos en los
procesos de endeudamiento, con el fin siempre último de aumentar su tasa
de ganancia. El proceso creciente de la “liberalización del mercado” se
traduciría en una reducción de las funciones del Estado. A lo largo de
los últimos veinte años las empresas transnacionales en El Salvador han
logrado desplazar al capital nacional, lo que ha vuelto al país más
dependiente y menos soberano. Sectores estratégicos de la economía (como
la generación y distribución de la energía eléctrica, telefonía fija y
celular, sistema de seguro de pensiones, etc.) han pasado a manos de
capital transnacional. Recientemente empresas transnacionales mineras
han querido apropiarse, también, de nuestros recursos naturales, pero ha
sido la organización y resistencia valiente de la gente que ha
permitido detener estos proyectos de muerte. En este contexto, a inicios
de este mes de mayo, después de cinco años, se ha dado el permiso a la
transnacional Walmart de construir un megamercado en el municipio de
Mejicanos [
1]l
, dicho permiso había sido negado por la alcaldía municipal anterior
previendo los impactos ambientales y laborales que la transnacional
podía ocasionar en la zona.
Para analizar los posibles impactos
que la transnacional Walmart ocasionará en la zona e ir desmitificando
su discurso, veamos algunos ejemplos de cuáles han sido los impactos
negativos que las empresas transnacionales generan a nivel mundial, y
algunos ejemplos específicos de los impactos económicos y sociales que
ha ocasionado Walmart en algunos países.
Los impactos de las transnacionales sobre los derechos humanos
Para
asegurarse la acumulación y concentración del capital a escala
ampliada, las empresas transnacionales se apropian del valor creado por
la economía real de dos maneras: “ La primera corresponde a un
empeoramiento de las condiciones de empleo (bajos salarios, horarios de
trabajo flexible, empleos precarios, desocupación) de manera que el
aumento de la productividad no beneficia a los trabajadores y sólo
redunda en el aumento de los beneficios del capital. La segunda forma en
que se produce esa apropiación de valor es a través de una repartición
desigual entre el capital productivo y el capital financiero, en
beneficio de este último” [
2].
También,
las empresas transnacionales, si las circunstancias lo requieren, hacen
uso de las fuerzas militares, promueven golpes de Estado, instigan
guerras civiles. Por ejemplo, la CIA promovió el golpe de Estado en 1953
en Irán luego que habían nacionalizado el petróleo, contrariando a los
intereses de la Anglo-Iranian Oil Company; la misma acción militar
sucedió en 1954 en Guatemala cuando se obligó a renunciar al presidente
Arbenz cuando se estaban impulsando reformas económicas como la reforma
agraria, las promotoras y financiadoras de la acción militar fueron la
CIA y la United Fruit Company; en Chile en 1972 la International
Telephone and Telegraph promovió y financió junto con la CIA el golpe de
Estado al presidente Salvador Allende, después que se promovió la
nacionalización de dicha empresa, dichas acciones marcaban el rumbo a un
proyecto político socialista en Chile, lógicamente EUA debía evitar que
eso sucediera; entre otros ejemplos [
3].
En
Mejicanos existen muchos pequeños negocios y mercados que serían
desplazados, esto aumentaría el desempleo, y la pobreza en la zona. Hay
que tomar en cuenta también que según el Mapa de Pobreza Urbana y
Exclusión Social [
4],
San Salvador, 2010, p.157, Mejicanos es el tercer municipio con mayor
incidencia de Asentamientos Urbanos Precarios a nivel de Área
Metropolitana de San Salvador, es decir que el 45% de los hogares tiene
dos o más necesidades básicas insatisfechas.
De igual manera, las
empresas transnacionales tienen una fuerte tendencia de rotación laboral
y despidos para reducir sus costos. En un estudio de la CEPAL [
5]
muestra que las empresas transnacionales tienen una fuerte tendencia a
hacer recortes masivos de personal, y que esto trae consigo serias
consecuencias económicas y sociales en los países donde se instalan.
Recientemente
en un periódico mexicano, sobre los casos de violación laboral de
Walmart, señalaba que la empresa tiene un 40% de rotación laboral, es
decir, que de cada diez trabajadores que emplea despide a cuatro [
6].
La organización de Trabajadores del Grupo Walmart de México manifestaba
que los empleados de Walmart son sometidos a jornadas de trabajo de más
de ocho horas, alta rotación de turnos, descuentos infundados, despidos
injustificados, represión sindical, alto riesgo de accidente y
explotación infantil al utilizarlos como empacadores sin sueldo [
7].
Transnacionales
como Walmart se valen de actos de corrupción y soborno a funcionarios
públicos para acelerar los permisos de construcción de sus tiendas [
8].
El diario The New York Times reveló recientemente que Walmart en México
pagó 24 millones de dólares en soborno a alcaldes y regidores en todo
el país, para poder acelerar permisos de construcción de sus tiendas .
No es de extrañar que lo mismo haya sucedido en Mejicanos, para lograr
acelerar los permisos por parte de la nueva alcaldía.
La
construcción de la megatienda de Walmart en Mejicanos tendrá una
extensión de ocho mil metros cuadrados, en el sector del bulevar
constitución en La Gloria, Mejicanos. Esto sin duda, profundizará la
deforestación y la vulnerabilidad ambiental en la zona. Los empleos que
prometen crear no compensan el daño ambiental que ocasionará (ya han
realizado una tala de más de 300 árboles en la zona), y el número de
personas que quedarán desempleadas cuando cierren los pequeños negocios,
y todo apunta a que estos empleos que generarán, según experiencias de
otros países, estarán sometidos a regímenes de flexibilidad laboral y
violación a sus derechos laborales.
La mentira de la Responsabilidad Social Corporativa de Walmart
Como
resultado de la toma de conciencia y crítica de los impactos negativos
que ocasionan las actividades de las empresas transnacionales en el
mundo, en los últimos años, éstas están impulsando el discurso de la
Responsabilidad Social Corporativa. El discurso vacío de la RSC
“pretende ocultar la realidad de que la rentabilidad máxima sigue siendo
el objetivo de las empresas en desmedro de los derechos fundamentales
del ser humano” [
9]
. Este discurso está siendo un negocio rentable para las
transnacionales, estudios muestran que las transnacionales que
implementan estos programas en el mundo aumentan más sus beneficios que
las empresas transnacionales que no lo hacen [
10].
Recientemente
Walmart ha anunciado, dentro de su programa de responsabilidad social,
un proyecto denominado “Mujeres, manos a la obra” [
11],
un programa supuestamente orientado a dar asistencia técnica a un grupo
de 15 mujeres para el cultivo de hortalizas, en el municipio de
Suchitoto. El negocio de este programa está en que el mismo Waltmart
será el comprador de esas hortalizas, lo que significa que tendrán el
control sobre el qué, cómo y cuánto producir, y fijará los precios de
compra; en otras palabras servirá para aumentar su ganancia a través de
la expoliación del trabajo de este grupo de mujeres. Obviamente no les
interesa fomentar la soberanía alimentaria en la zona, y mucho menos
potenciar la articulación en redes de la producción campesina.
Es
un lavado de cara que pretenden hacer para mejorar su imagen, comparado
con todos los impactos laborales, ambientales y sociales que
ocasionarían, este programa no es más que retórica barata.
La errónea visión de CONAMYPE y la expoliación de Walmart
La
comisión Nacional de la Micro y la pequeña empresa, desde hace 5 años,
está apoyando el programa de Walmart “Una mano para crecer”, desde que
inició el programa se han adherido 100 MYPES , las cuales proveen a
Walmart alimentos y artículos no alimenticios para el cuidado personal y
del hogar [
12].
Si CONAMYPE entendiera que con estas prácticas está beneficiando a las
grandes transnacionales y que está posibilitando que las micro y
pequeñas empresas sean expoliadas por el gran capital, estaría
orientando sus estrategias a la articulación inter e intra sectorial de
las empresas solidaras. Lógicamente no lo entiende o no lo quiere
entender. Para que el valor de su producto (de la pequeña producción)
realmente sea de beneficio para los y las trabajadoras ya no debería de
haber vinculación con el sector capitalista y se debería potenciar las
asociatividad y la autogestión, para poder potenciar sus compras y
ventas de manera articulada.
Walmart actúa en el mercado como un
monopsonio, es decir que es una empresa compradora con influencia
anticompetitiva, que ejerce control sobre los proveedores y la fijación
de precios. Moberg señala “…Dos estudios independientes establecieron
que es probable que los proveedores de Wal-Mart, especialmente empresas
pequeñas, terminen con beneficios inferiores a los de los proveedores
que trabajan para otras grandes empresas minoristas. Más allá de
presionar los precios, Wal-Mart a menudo “saca un bocado” a los
proveedores retardando los pagos” [
13] .
Walmart
profundizará la expoliación de las y los pequeños productores
agrícolas, artesanales y/o industriales de la zona de Mejicanos.
¿Qué debemos hacer ante la amenaza de la transnacional Walmart en Mejicanos?
Una
vez más las transnacionales continúan invadiendo nuestros pueblos, su
lógica es la misma: la ampliación de sus mercados para seguir acumulando
capital a niveles cada vez mayores. Para evitar que el megaproyecto de
Walmart avance en Mejicanos, el movimiento social debe de articularse,
pasar de la indignación a la acción y plantear estrategias para resistir
y hacer frente para evitar los graves impactos económicos, sociales y
ambientales, que se ocasionarían en el municipio.
El enemigo real
de la clase trabajadora sigue siendo el gran capital. Por la vida de las
niñas y niños, por el cuidado del medio ambiente, deberíamos reaccionar
y detener cuanto antes este proyecto de muerte. Las compañeras y
compañeros ecologistas anti minería en Cabañas nos han demostrado que
resistiendo y luchando es posible frenar el ansia desmedido de dinero de
las transnacionales. Su resistencia de varios años no ha permitido
avanzar, hasta la fecha, la explotación minera en zona por parte la
transnacional Pacific Rim.
Al capitalismo se le detiene, ahí, en
la calle; se le detiene fomentando la producción, comercialización y
consumo solidario con una visión antisistema. Los y las pobres somos el
99% de la humanidad, la unión y la lucha colectiva permitirá seguir
haciendo posible la esperanza y la vida en este planeta.
Notas [
1]
LPG, “Walmart Mejicanos abrirá en diciembre”, 3 de mayo de 2012, en:
http://www.laprensagrafica.com/economia/nacional/260999-walmart-mejicanos-abriria-en-diciembre.htm
[
2]
Teitelbaum, Alejandro. La armadura del capitalismo, El poder de las
sociedades transnacionales en el mundo contemporáneo. Icaria Editorial,
Barcelona, 2010.
[
3] Ibid , p. 81
[
4] FLACSO, PNUD, GOES, Mapa de Pobreza Pobreza Urbana y Exclusión Social
[
5] Carlson, Beverley, Destrucción de empleos, multinacionales y globalización: La anatomía de la pérdida del poder, CEPAL, 2003
[
6]
Terra México, “Denuncian ex empleados violaciones laborales de
Walmart”, 27 de abril de 2012, en :
http://economia.terra.com.mx/noticias/noticia.aspx?idNoticia=201204271735_REF_81142218
[
7] Ibid
[
8]
The New York Times, “Vast Mexico Bribery Case Hushed Up by Wal-Mart
After Top-Level Struggle”, 21 de abril de 2012, en :
http://www.nytimes.com/2012/04/22/business/at-wal-mart-in-mexico-a-bribe-inquiry-silenced.html?_r=2&nl=todaysheadlines&emc=edit_th_2012042
[
9] Op Cit, Teitelbaum, p. 259
[
10]
Ver: Ramiro, Pedro, et.al, La Responsabilidad Social Corporativa de las
empresas transnacionales y los derechos humanos, OMAL, CEICOM, Paz con
Dignidad, 2010
[
11]
LPG, “Walmart beneficia a grupo de mujeres”, 22 de mayo de 2012, en:
http://www.laprensagrafica.com/economia/nacional/264266-walmart-beneficia-a-grupo-de-mujeres.html
[
12]
CONAMYPE, “CONAMYPE y Wal Mart realizan charla informativa para
proveedores PYMES”, en :
http://www.conamype.gob.sv/index.php?option=com_content&view=article&id=256:conamype-y-wal-mart-realizan-charla-informativa-para-proveedores-pymes&catid=1:noticias-ciudadano&Itemid=77
[
13] Moberg, Op. Cit.
Fuente original:
http://www.revistapueblos.org/spip.php?article2429