|
El
ministro para
Energía
Eléctrica,
Jesse Chacón,
informó este
miércoles que
la falla
eléctrica que
se registró
ayer en varios
estados del
país se debió
al
desprendimiento
de una malla
en una de las
torres en la
línea 765. "Tenemos serios indicios de que hubo una actividad dirigida al retiro de los sujetadores de la línea", dijo Chacón en declaraciones transmitidas por Venezolana de Televisión. El ministro indicó que realizarán labores en la subestación San Gerónimo, asociada a la línea que presentó la falla, para blindar este tramo del Sistema Eléctrico Nacional. Además, para eliminar el uso definitivo de mallas en la citada línea de transmisión, se cerrará el relleno sanitario aledaño a la subestación. Asimismo, el Ministro informó que cuerpos de seguridad del Estado realizan las investigaciones pertinentes para determinar las causas de la falla. El Ejecutivo Nacional también lanzará el próximo 16 de septiembre la Misión Eléctrica Venezuela, refirió Chacón. |
Agencia
Venezolana de
Noticias (AVN)
(Miércoles
04/09/2013)
|
ACLARACIÓN
El Blog FARABUNTERRA, no tiene ninguna responsabilidad por el contenido de los sitios que han sido citados como fuente, los cuales se seleccionan según las normas del diálogo abierto y civilizado.
Las imágenes y productos multimedia, son extraídos en su gran mayoría directamente de la Red. En el caso de que la publicación de algún material pudiera lesionar derechos de autor, pido por favor ser notificado por correo electrónico ubicado en la parte superior para su inmediata remoción.
PARA NUESTROS ENEMIGOS IDEOLÓGICOS LES DECIMOS DESDE SIEMPRE: NO NOS CALLARÁN!!!
TODOS SOMOS UNOS!
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miércoles, 4 de septiembre de 2013
Desprendimiento de malla en línea 765 provocó falla eléctrica de ayer martes
Presidente Maduro anuncia creación de Unidad de Seguridad del Sistema Eléctrico
|
El
presidente de
la República,
Nicolás
Maduro,
anunció este
miércoles la
creación de la
Unidad de
Seguridad e
Inteligencia
del Sistema
Eléctrico, la
cual
funcionará
como un órgano
de fuerzas
especiales que
garantice la
defensa del
Sistema
Eléctrico
Nacional
(SEN). A través de su cuenta en Twitter @NicolasMaduro, informó también la creación de la Secretaría Ejecutiva del Estado Mayor Eléctrico, que será el "motor dinámico de la consolidación de los planes eléctricos". "Designé al frente de ambos organismos al Mayor General Gustavo González López, patriota y estudioso de la seguridad", indicó en la red social. El jefe de Estado instó al pueblo venezolano a consolidar el equilibrio entre generación y consumo, "concentrando esfuerzos en la seguridad del sistema contra sabotajes calculados y contra la maldad de una minoría que busca colapsar nuestra Patria", expresó. Más temprano, el primer mandatario nacional sostuvo una reunión con el Estado Mayor Eléctrico y el Alto Mando Cívico Militar, en la cual se evaluaron los planes activados ante el sabotaje eléctrico registrado el pasado martes en el centro y occidente del país. Al respecto, el ministro para la Energía Eléctrica, Jesse Chacón, señaló que se realizará mantenimiento y supervisión de las mallas de la línea 765, donde ocurrió la falla eléctrica, y reiteró que actualmente el SEN está estabilizado. "Vamos a ir al proceso de sustitución de la malla de la torre que falló y vamos a empezar un plan de mantenimiento y supervisión de todo el sistema 765, dada la importancia que tiene éste para todo el sistema eléctrico nacional", explicó Chacón, quien detalló que 60% de la energía que Venezuela consume es distribuida por el referido tendido eléctrico. Finalmente, informó que el próximo 16 de septiembre se iniciará la Misión Eléctrica Venezuela, que prevé consolidar un sistema de seguridad más óptimo para el Sistema Eléctrico Nacional. |
Agencia
Venezolana de
Noticias (AVN)
(Miércoles
04/09/2013)
|
Salvadoreños rechazan visita de opositoras golpistas venezolanas
http://www.contrainjerencia.com/?p=73996
La Red Salvadoreña de Solidaridad con Venezuela rechazó el
martes la visita que realizaron a ese país centroamericano las diputadas
venezolanas de la opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD), María
Corina Machado y Dinorah Figuera.
En un comunicado, dicha red acusó a las diputadas
de viajar a El Salvador “con el propósito de desprestigiar los logros de
la Revolución Bolivariana y seguir el plan internacional de
desestabilización contra el Gobierno legítimamente electo, encabezado
por Nicolás Maduro”.Además destacó que Machado “en este momento,
enfrenta una grave acusación en Venezuela por supuesto delito de
terrorismo, formalizado ante la Asamblea Nacional de Venezuela por
Stella Lugo, gobernadora del estado de Falcón”.
Las diputadas fueron invitadas por un grupo denominado “Movimiento
300”, conformado por jóvenes de la derecha salvadoreña y empresarios
vinculados al partido Alianza Republicana Nacionalista (ARENA).
Durante el evento, ambas representantes de la oposición venezolana atacaron duramente las políticas de izquierda de varios Gobiernos latinoamericanos.
La Red Salvadoreña de Solidaridad con Venezuela también hizo un llamado de alerta al pueblo de ese país centroamericano a rechazar la injerencia en sus asuntos internos y a estar atentos ante los movimientos y acciones de dichos voceros de la derecha internacional “que no sólo buscan impedir el progreso de Venezuela, sino también de toda América Latina en beneficio de los intereses neoliberales, corporativos y empresariales de sus grupos y partidos”.
De acuerdo con la organización, ambas diputadas “representan a una derecha retrógrada y apátrida, que además apoya de forma velada la intervención de Estados Unidos en Siria, no sólo por los vínculos de su grupo político, sino también por el odio ciego que le tienen a la Revolución Bolivariana y a todos los movimientos progresistas de Nuestra América”.
Protestas parecidas también se celebraron en Bolivia, Chile, Colombia y Perú, entre otros países latinoamericanos, en rechazo a la visita del líder de la oposición venezolana, Henrique Capriles, a dichos Estados.
Henrique Capriles perdió en los comicios presidenciales del pasado 14 de abril, y tras su fracaso busca formar una oposición regional contra el presidente Nicolás Maduro, visitando países latinoamericanos.
Durante el evento, ambas representantes de la oposición venezolana atacaron duramente las políticas de izquierda de varios Gobiernos latinoamericanos.
La Red Salvadoreña de Solidaridad con Venezuela también hizo un llamado de alerta al pueblo de ese país centroamericano a rechazar la injerencia en sus asuntos internos y a estar atentos ante los movimientos y acciones de dichos voceros de la derecha internacional “que no sólo buscan impedir el progreso de Venezuela, sino también de toda América Latina en beneficio de los intereses neoliberales, corporativos y empresariales de sus grupos y partidos”.
De acuerdo con la organización, ambas diputadas “representan a una derecha retrógrada y apátrida, que además apoya de forma velada la intervención de Estados Unidos en Siria, no sólo por los vínculos de su grupo político, sino también por el odio ciego que le tienen a la Revolución Bolivariana y a todos los movimientos progresistas de Nuestra América”.
Protestas parecidas también se celebraron en Bolivia, Chile, Colombia y Perú, entre otros países latinoamericanos, en rechazo a la visita del líder de la oposición venezolana, Henrique Capriles, a dichos Estados.
Henrique Capriles perdió en los comicios presidenciales del pasado 14 de abril, y tras su fracaso busca formar una oposición regional contra el presidente Nicolás Maduro, visitando países latinoamericanos.
HISPAN TV
‘Hacker’ publica los correos “sirios” de un coronel de EEUU
http://www.contrainjerencia.com/?p=74040
RT – En medio de los preparativos de EE.UU. para un ataque
contra Siria un ‘hacker’ norteamericano afirma haber accedido a los
correos de un coronel del Ejército de EE.UU. que indican que el supuesto
ataque químico cerca de Damasco fue obra del Pentágono.
EE.UU. planea llevar a cabo una acción militar contra Siria
basándose en los alegatos de las fuerzas opositoras a Al Assad, que
denunciaron que el Gobierno sirio mató a centenares de personas el
pasado 21 de agosto en un ataque con armas químicas cerca de Damasco.
Sin embargo, un pirata informático declaró, a través del portal
pastebin.com, que logró acceder a la correspondencia de un coronel de la
Inteligencia de EE.UU. que demuestra que el ataque químico fue un
montaje organizado por el propio Pentágono.
Se trata de los correos de Anthony Jamie MacDonald, director general de Personal de la oficina de Operaciones y Planes del Jefe Adjunto del Estado Mayor de Inteligencia del Ejército.
En un correo enviado el 22 de agosto, un colega del coronel, Eugene Furst, le felicita por haber realizado una operación “exitosa” y adjunta el enlace al artículo de ‘The Washington Post’ sobre el supuesto ataque químico en Siria del 21 de agosto.
Furst también menciona que fue “bien organizado”, informa el
‘hacker’, agregando: “Mis ojos se negaron a creerlo. Malditos
desgraciados, ellos organizaron un ataque químico”.
El pirata informático menciona, además, la correspondencia entre la esposa de MacDonald, Jennifer, con una amiga suya que confiesa que “no puede dejar de pensar” en los niños que fallecieron en “ese terrible ataque con gas” en Siria.
“Yo también me asusté. Pero Tony me consoló. Dijo que los niños no
resultaron heridos, fue hecho para cámaras. Así que no te preocupes,
querida mía”, contesta Jennifer.
Estas revelaciones se unen a otros informes sobre el supuesto ataque
químico que Washington atribuye a las fuerzas de Bashar al Assad, algo
que el Gobierno sirio niega rotundamente. Hay que destacar que incluso
las informaciones que vienen de EE.UU. y sus aliados a veces son
bastante contradictorias. Así, un informe de los servicios secretos
franceses dice que el ataque dejó “al menos” 281 muertes, una cifra que
está muy lejos de las “más de 1.400 víctimas mortales” de las que habla
EE.UU.
Se trata de los correos de Anthony Jamie MacDonald, director general de Personal de la oficina de Operaciones y Planes del Jefe Adjunto del Estado Mayor de Inteligencia del Ejército.
En un correo enviado el 22 de agosto, un colega del coronel, Eugene Furst, le felicita por haber realizado una operación “exitosa” y adjunta el enlace al artículo de ‘The Washington Post’ sobre el supuesto ataque químico en Siria del 21 de agosto.
El pirata informático menciona, además, la correspondencia entre la esposa de MacDonald, Jennifer, con una amiga suya que confiesa que “no puede dejar de pensar” en los niños que fallecieron en “ese terrible ataque con gas” en Siria.
RT
Lo que no se dijo sobre Martin Luther King
Público.es
A raíz del cincuenta
aniversario de la Marcha de Washington, donde el Reverendo Martin Luther
King dio su famoso discurso “Yo tengo un sueño” (I Have a Dream), se
han escrito muchos reportajes, tanto en EEUU como en España, sobre
aquella marcha y sobre Martin Luther King, refiriéndose a este último
como una figura inspiracional que, actuando como la conciencia de la
nación estadounidense, exigió a aquella sociedad el fin de la
discriminación contra la población negra, de origen africano. Es difícil
ver u oír aquel discurso sin conectar con su causa.
Ahora bien, esta imagen inspiracional de Martin Luther King se ha construido a costa de olvidar y hacer olvidar a otro Martin Luther King, el Martin Luther King real, que veía esta discriminación como resultado de unas relaciones de poder basadas en una explotación, no solo de raza, sino también de clase social. Se ha silenciado que Martin Luther King (a partir de ahora MLK) fue un socialista que, sin lugar a dudas, hubiera sido muy crítico con las sucesivas políticas, tanto domésticas como internacionales, llevadas a cabo durante todos estos años por los gobiernos federales, incluyendo la Administración Obama.
MLK estuvo en contra de la guerra del Vietnam, como hubiera estado en contra de las guerras de Irak y Afganistán, y no solo por su pacifismo, sino también por su antimilitarismo y antiimperialismo. Definió al gobierno de EEUU como “el máximo agente de violencia hoy en el mundo… gastándose más en los instrumentos de muerte y destrucción que en programas sociales vitales para las clases populares del país”. Era profundamente anticapitalista, como consta en su discurso de que “deberíamos denunciar a aquellos que se resisten a perder sus privilegios y placeres que vienen junto a los beneficios adquiridos de sus inversiones, extrayendo su riqueza a través de la explotación”.
Y en 1967 condenó con toda contundencia los tres diablos que –a su parecer- “caracterizaban al sistema de poder estadounidense, a saber, el racismo, la explotación económica y el militarismo”, acentuando que “las mismas fuerzas que consiguen enormes beneficios a través de las guerras son las responsables de la enorme pobreza en nuestro país” (todas estas notas proceden del excelente artículo de Michael Parenti “I Have a Dream, a Blurred Vision”, 29.08.13).
Y su último discurso, en apoyo de las reivindicaciones de los trabajadores de los servicios de saneamiento que estaban en huelga, concluyó con la famosa frase de que “la lucha central en EEUU es la lucha de clases”. Dos semanas más tarde fue asesinado, sin que nunca se haya aclarado tal hecho. Una persona fugitiva de la cárcel de Missouri, James Earl Ray, fue acusado de asesinarle. Fue detenido en el aeropuerto de Heathrow, en Londres, con gran cantidad de dinero en su posesión. Nunca se aclaró quién dio ese dinero.
MLK fue un socialista radical en sus análisis y en sus propuestas
Una cosa es que MLK fuera la conciencia de EEUU, exigiendo que no se discriminara a los negros, petición con un fuerte contenido moral al cual era difícil oponerse. Pero otra cosa muy distinta y amenazante para la estructura de poder era subrayar que el origen de la pobreza y discriminación (que incluye también a amplios sectores de la clase trabajadora blanca, además de la negra, pues la mayoría de pobres en EEUU son blancos) requiera un cambio revolucionario (por muy no violento que sea) de las estructuras capitalistas de aquel país. Y la elección del Presidente Obama prueba, precisamente, la certeza del diagnóstico de MLK. Hoy el Presidente de EEUU es un afroamericano, lo cual, no hay ninguna duda, es un gran adelanto. Pero la pobreza entre negros (y entre blancos) en EEUU no ha cambiado desde entonces.
De ahí la enorme hostilidad del establishment estadounidense, del cual la Policía Federal, FBI, fue un elemento clave, dirigida por una de las figuras más nefastas de la historia de EEUU, J. Edgar Hoover (definido por el famoso periodista Russell Baker, del New York Times, como un “tirano patético”) que había intentado convencer al Fiscal General del Estado Federal, Robert Kennedy, “de que el cerebro de los negros era un veinticinco por ciento más pequeño que el de los blancos”. Era cercano políticamente al senador segregacionista de Carolina del Sur, Strom Thurmond, e intentó por todos los medios desacreditar al movimiento antisegregacionista y a sus dirigentes, gran número de los cuales eran socialistas y comunistas. En realidad, fueron los sindicatos, y muy particularmente, el sindicato del automóvil, el UAW (United Automobile Workers) los que financiaron en gran parte tal marcha. Y a la izquierda de MLK en la marcha estaba Walter Reuther, su secretario general, socialista y blanco. Una tercera parte del cuarto de millón en la marcha de Washington eran blancos, gran número de ellos sindicalistas y miembros de partidos de izquierda. El eslogan de la marcha era “libertad, justicia y trabajo”. Y el organizador de la marcha, Asa Philip Randolph, era el sindicalista afroamericano más conocido en EEUU, dirigente del sindicato ferroviario (Paul Le Blanc, “Revolutionary Road, Partial Victory. The March on Washington for Jobs and Freedom”, Monthly Review, Sept 2013).
Y cuando el Presidente Kennedy, a instancias de Hoover, jefe del FBI, puso como condición para que él apoyara la marcha, que despidiera del liderazgo a aquellos radicales que estaban en puestos de dirección, MLK se negó. La presión de la calle era tal que el Presidente Kennedy decidió a última hora apoyar la marcha, recibiendo a MLK en la Casa Blanca. Y el obispo católico de Washington, Patrick O’Boyle, amenazó con no participar en la marcha a no ser que los discursos (que se habían distribuido con antelación) se moderaran.
Últimas observaciones. En 1986, el día del nacimiento de MLK fue declarado fiesta nacional cada año. Pero en esta captura de la imagen popular de MLK se ha transformado deliberadamente su mensaje y figura para reciclarlo como una figura inspiracional, conciencia del país, a favor de los derechos civiles de la población afroamericana (con especial hincapié en su poder de votar), olvidándose deliberadamente del MLK real, que pidió un cambio profundo, no solo en las relaciones de raza, sino también de clase social. De esto último ni se habla.
La historia se repite: las campañas de Jesse Jackson
Yo tuve la oportunidad de experimentar una situación parecida durante mi participación en la campaña electoral del Reverendo Jesse Jackson (que estaba con MLK cuando fue asesinado), en las primarias a las elecciones del candidato presidencial del Partido Demócrata. En respuesta a su invitación, fue senior advisor (asesor especial) en su campaña del 1984, y más tarde en la del 1988. En 1984, y en contra de mis consejos, se presentó como la voz de la minoría negra, exigiendo su incorporación a la sociedad americana. En aquella campaña, el establishment liberal estadounidense (cuyo mayor portavoz era y es The New York Times) escribió un editorial enormemente positivo acerca de su candidatura. La razón de que yo desaconsejara esta estrategia, sin embargo, era fácil de entender. Un representante de los intereses de una minoría difícilmente podría alcanzar el apoyo mayoritario de la población votante. Presentarse como el candidato de una minoría defendiendo primordialmente los intereses de tal minoría, no era la mejor manera de ganar el apoyo de la mayoría, para ser Presidente de los EEUU.
En 1988, sin embargo, no se presentó como la conciencia de EEUU o la voz de los negros, sino la voz de la clase trabajadora de EEUU. Y cuando los medios le preguntaron cómo él –negro- obtendría el voto del trabajador blanco, contestó: “haciéndole ver que tiene más en común con un obrero negro, por ser obrero, que con su patrón (boss) porque sea blanco”. Cuando se suman todos los colores (negro, blanco, amarillo, gris, etc.) la clase trabajadora de EEUU es la mayoría de la población. En un discurso de clase, movilizó las bases del Partido Demócrata (que están más a la izquierda que su dirección), y consiguió el 40% de todos los delegados en el congreso del Partido Demócrata. Nunca antes, ni después, las izquierdas en EEUU tuvieron tanto poder desde los años 50. Y The New York Times escribió un editorial muy negativo diciendo que Jesse Jackson, en caso de ser elegido, destruiría EEUU, es decir, su EEUU.
La lección de esta situación es clara. La estructura de poder deriva su enorme influencia de su poder de clase (así como género y raza). Y no permite que se toque ese poder, derivando las legítimas demandas de fin de discriminación de género y raza, reciclándolas (incluyendo elementos de tales grupos discriminados dentro de la estructura de poder) para poder adaptarlos a la estructura social dominante. Existe hoy un Presidente afroamericano y una clase media negra que no existían antes, lo cual es motivo de celebración. Pero el estándar de vida de la mayoría de negros y blancos (pertenecientes a la clase trabajadora) no ha mejorado durante todo este periodo. Así de claro.
Fuente: http://blogs.publico.es/vicenc-navarro/2013/09/03/lo-que-no-se-dijo-sobre-martin-luther-king/
Ahora bien, esta imagen inspiracional de Martin Luther King se ha construido a costa de olvidar y hacer olvidar a otro Martin Luther King, el Martin Luther King real, que veía esta discriminación como resultado de unas relaciones de poder basadas en una explotación, no solo de raza, sino también de clase social. Se ha silenciado que Martin Luther King (a partir de ahora MLK) fue un socialista que, sin lugar a dudas, hubiera sido muy crítico con las sucesivas políticas, tanto domésticas como internacionales, llevadas a cabo durante todos estos años por los gobiernos federales, incluyendo la Administración Obama.
MLK estuvo en contra de la guerra del Vietnam, como hubiera estado en contra de las guerras de Irak y Afganistán, y no solo por su pacifismo, sino también por su antimilitarismo y antiimperialismo. Definió al gobierno de EEUU como “el máximo agente de violencia hoy en el mundo… gastándose más en los instrumentos de muerte y destrucción que en programas sociales vitales para las clases populares del país”. Era profundamente anticapitalista, como consta en su discurso de que “deberíamos denunciar a aquellos que se resisten a perder sus privilegios y placeres que vienen junto a los beneficios adquiridos de sus inversiones, extrayendo su riqueza a través de la explotación”.
Y en 1967 condenó con toda contundencia los tres diablos que –a su parecer- “caracterizaban al sistema de poder estadounidense, a saber, el racismo, la explotación económica y el militarismo”, acentuando que “las mismas fuerzas que consiguen enormes beneficios a través de las guerras son las responsables de la enorme pobreza en nuestro país” (todas estas notas proceden del excelente artículo de Michael Parenti “I Have a Dream, a Blurred Vision”, 29.08.13).
Y su último discurso, en apoyo de las reivindicaciones de los trabajadores de los servicios de saneamiento que estaban en huelga, concluyó con la famosa frase de que “la lucha central en EEUU es la lucha de clases”. Dos semanas más tarde fue asesinado, sin que nunca se haya aclarado tal hecho. Una persona fugitiva de la cárcel de Missouri, James Earl Ray, fue acusado de asesinarle. Fue detenido en el aeropuerto de Heathrow, en Londres, con gran cantidad de dinero en su posesión. Nunca se aclaró quién dio ese dinero.
MLK fue un socialista radical en sus análisis y en sus propuestas
Una cosa es que MLK fuera la conciencia de EEUU, exigiendo que no se discriminara a los negros, petición con un fuerte contenido moral al cual era difícil oponerse. Pero otra cosa muy distinta y amenazante para la estructura de poder era subrayar que el origen de la pobreza y discriminación (que incluye también a amplios sectores de la clase trabajadora blanca, además de la negra, pues la mayoría de pobres en EEUU son blancos) requiera un cambio revolucionario (por muy no violento que sea) de las estructuras capitalistas de aquel país. Y la elección del Presidente Obama prueba, precisamente, la certeza del diagnóstico de MLK. Hoy el Presidente de EEUU es un afroamericano, lo cual, no hay ninguna duda, es un gran adelanto. Pero la pobreza entre negros (y entre blancos) en EEUU no ha cambiado desde entonces.
De ahí la enorme hostilidad del establishment estadounidense, del cual la Policía Federal, FBI, fue un elemento clave, dirigida por una de las figuras más nefastas de la historia de EEUU, J. Edgar Hoover (definido por el famoso periodista Russell Baker, del New York Times, como un “tirano patético”) que había intentado convencer al Fiscal General del Estado Federal, Robert Kennedy, “de que el cerebro de los negros era un veinticinco por ciento más pequeño que el de los blancos”. Era cercano políticamente al senador segregacionista de Carolina del Sur, Strom Thurmond, e intentó por todos los medios desacreditar al movimiento antisegregacionista y a sus dirigentes, gran número de los cuales eran socialistas y comunistas. En realidad, fueron los sindicatos, y muy particularmente, el sindicato del automóvil, el UAW (United Automobile Workers) los que financiaron en gran parte tal marcha. Y a la izquierda de MLK en la marcha estaba Walter Reuther, su secretario general, socialista y blanco. Una tercera parte del cuarto de millón en la marcha de Washington eran blancos, gran número de ellos sindicalistas y miembros de partidos de izquierda. El eslogan de la marcha era “libertad, justicia y trabajo”. Y el organizador de la marcha, Asa Philip Randolph, era el sindicalista afroamericano más conocido en EEUU, dirigente del sindicato ferroviario (Paul Le Blanc, “Revolutionary Road, Partial Victory. The March on Washington for Jobs and Freedom”, Monthly Review, Sept 2013).
Y cuando el Presidente Kennedy, a instancias de Hoover, jefe del FBI, puso como condición para que él apoyara la marcha, que despidiera del liderazgo a aquellos radicales que estaban en puestos de dirección, MLK se negó. La presión de la calle era tal que el Presidente Kennedy decidió a última hora apoyar la marcha, recibiendo a MLK en la Casa Blanca. Y el obispo católico de Washington, Patrick O’Boyle, amenazó con no participar en la marcha a no ser que los discursos (que se habían distribuido con antelación) se moderaran.
Últimas observaciones. En 1986, el día del nacimiento de MLK fue declarado fiesta nacional cada año. Pero en esta captura de la imagen popular de MLK se ha transformado deliberadamente su mensaje y figura para reciclarlo como una figura inspiracional, conciencia del país, a favor de los derechos civiles de la población afroamericana (con especial hincapié en su poder de votar), olvidándose deliberadamente del MLK real, que pidió un cambio profundo, no solo en las relaciones de raza, sino también de clase social. De esto último ni se habla.
La historia se repite: las campañas de Jesse Jackson
Yo tuve la oportunidad de experimentar una situación parecida durante mi participación en la campaña electoral del Reverendo Jesse Jackson (que estaba con MLK cuando fue asesinado), en las primarias a las elecciones del candidato presidencial del Partido Demócrata. En respuesta a su invitación, fue senior advisor (asesor especial) en su campaña del 1984, y más tarde en la del 1988. En 1984, y en contra de mis consejos, se presentó como la voz de la minoría negra, exigiendo su incorporación a la sociedad americana. En aquella campaña, el establishment liberal estadounidense (cuyo mayor portavoz era y es The New York Times) escribió un editorial enormemente positivo acerca de su candidatura. La razón de que yo desaconsejara esta estrategia, sin embargo, era fácil de entender. Un representante de los intereses de una minoría difícilmente podría alcanzar el apoyo mayoritario de la población votante. Presentarse como el candidato de una minoría defendiendo primordialmente los intereses de tal minoría, no era la mejor manera de ganar el apoyo de la mayoría, para ser Presidente de los EEUU.
En 1988, sin embargo, no se presentó como la conciencia de EEUU o la voz de los negros, sino la voz de la clase trabajadora de EEUU. Y cuando los medios le preguntaron cómo él –negro- obtendría el voto del trabajador blanco, contestó: “haciéndole ver que tiene más en común con un obrero negro, por ser obrero, que con su patrón (boss) porque sea blanco”. Cuando se suman todos los colores (negro, blanco, amarillo, gris, etc.) la clase trabajadora de EEUU es la mayoría de la población. En un discurso de clase, movilizó las bases del Partido Demócrata (que están más a la izquierda que su dirección), y consiguió el 40% de todos los delegados en el congreso del Partido Demócrata. Nunca antes, ni después, las izquierdas en EEUU tuvieron tanto poder desde los años 50. Y The New York Times escribió un editorial muy negativo diciendo que Jesse Jackson, en caso de ser elegido, destruiría EEUU, es decir, su EEUU.
La lección de esta situación es clara. La estructura de poder deriva su enorme influencia de su poder de clase (así como género y raza). Y no permite que se toque ese poder, derivando las legítimas demandas de fin de discriminación de género y raza, reciclándolas (incluyendo elementos de tales grupos discriminados dentro de la estructura de poder) para poder adaptarlos a la estructura social dominante. Existe hoy un Presidente afroamericano y una clase media negra que no existían antes, lo cual es motivo de celebración. Pero el estándar de vida de la mayoría de negros y blancos (pertenecientes a la clase trabajadora) no ha mejorado durante todo este periodo. Así de claro.
Fuente: http://blogs.publico.es/vicenc-navarro/2013/09/03/lo-que-no-se-dijo-sobre-martin-luther-king/
Análisis de medios 3-4 de septiembre
Las encuestas de opinión publicadas ayer por LPG Datos, siguen
generando reacciones en los medios. Por alguna razón, LPG ve necesario
destacar que sus encuestas suelen tener una alta credibilidad. Esto
ante la evidencia de la coincidencia entre la publicación de la
encuesta, un día después de la multitudinaria concentración de
militantes y simpatizantes del FMLN para acompañar a los convencionistas
que aprobaron por unanimidad el programa de gobierno de la fórmula
Salvador- Óscar.
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Cómo la CIA se infiltró en Chile para derrocar a Allende
http://spanish.ruvr.ru/2013_09_04/C-mo-la-CIA-se-infiltr-en-Chile-para-derrocar-a-Allende-2727/
Chile
se apresta a conmemorar este 11 de septiembre las cuatro décadas del
golpe militar más devastador que ha conocido su historia, encabezado por
el fallecido dictador Augusto Pinochet y que culminó con el bombardeo
al palacio de La Moneda y el suicidio del presidente Salvador Allende.
Tanto
el gobierno actual encabezado por Sebastián Piñera, como la oposición
liderada por la candidata de la centroizquierda a la primera
magistratura, Michelle Bachelet, realizarán actos para recordar una
fecha respecto a la cual aún existe controversia en torno a las razones
que llevaron a tan violento quiebre institucional.
El
periodista chileno Carlos Basso lleva más de una década analizando los
documentos desclasificados de la administración estadounidense
vinculados con Chile. En base a este material, acaba de publicar el
libro La CIA en Chile. 1970-1973,
para cuya redacción seleccionó el material más relevante de los
informes liberados por la inteligencia estadounidense respecto a este
período.
A continuación, ofrecemos la entrevista exclusiva que el periodista ofreció a La Voz de Rusia.
—¿En qué momento comienza, formalmente, la infiltración de la CIA en Chile?
—Apenas
se crea la CIA en 1947, se instala una oficina en Santiago, pues en el
contexto de la Guerra Fría que estaba comenzando a estallar, Chile ya
estaba en el radar de EEUU como un lugar interesante para los rusos...
Adicionalmente, había un tema económico: las tres mayores compañías que
había en Chile en aquellos años eran de capitales norteamericanos.
La
oficina estaba ubicada en el mismo edificio que la embajada
estadounidense, justo al frente del palacio de La Moneda, sede del
gobierno y en donde también operaba la misión militar norteamericana que
incluía a varios oficiales de la Agencia de Inteligencia del Pentágono
(DIA).
Más
tarde, en 1970, mientras se planificaba un golpe de Estado para evitar
que Allende asumiera la presidencia, se enviaron a cuatro oficiales del
tipo false flag (es decir, con
identidades falsas) a operar en conjunto con los grupos de ultraderecha,
los que terminaron asesinando al general René Schneider, quien era el
Comandante en Jefe del Ejército chileno en esa fecha. Los cuatro
oficiales fueron removidos de Chile apenas producido el atentado.
Ese
mismo año, la CIA comienza a infiltrarse en los grupos de
ultraizquierda, actividad que llega a su punto máximo en la época de
Pinochet cuando se introducen por completo en el Movimiento de Izquierda
Revolucionaria (MIR) y el Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR).
Ello, con miras a la propia inteligencia y no para compartirla con el
gobierno de Pinochet, lo que no deja de resultar curioso.
—¿Cuál
era la opinión de la inteligencia estadounidense respecto al gobierno
de la Unidad Popular, encabezado por Allende, y la izquierda chilena?
—En
general, la opinión era calamitosa, como era de esperar. Especialmente
así lo pensaban el Director de la CIA en 1970, Richard Helms, y altos
funcionarios del organismo como William Broe y David Atlee Phillips,
quizá las dos personas que más responsabilidad tuvieron en todas las
operaciones de la CIA en Chile entre 1970 y 1973.
No
obstante, es muy interesante (y dramática) la posición que asumió el
jefe de la oficina de la CIA en Santiago, Henry Hecksher, un exoficial
de la Oficina de Servicios Estratégico (OSS) que se fogueó en Berlín,
Guatemala y Laos. Hecksher se opuso al golpe de Estado que se pretendía
dar en octubre de 1970 para evitar que Allende, ganador de las
elecciones de septiembre de ese año, fuera ratificado por el Congreso.
Ciertamente,
era un hombre de derecha, un agente histórico de la CIA que hizo lo que
“tenía que hacer”. Pese a ello, envió varios cables a Washington
indicando que no existían razones objetivas para el golpe. Igualmente,
advirtió que el intento de secuestro que planeaban sus jefes en contra
del entonces comandante en jefe del Ejército chileno, general René
Schneider, culminaría en un baño de sangre… tal como sucedió.
Luego
de que Allende asumió el poder, Hecksher fue despedido de la CIA,
acusado de "socialista". Es más: hasta 1973 se decía en los pasillos de
la agencia que él era el culpable de que Allende estuviera gobernando.
—¿Qué
perfil manejaban los agentes de la CIA en torno a la figura de Allende?
¿Le veían como un elemento peligroso y potencialmente desestabilizador
en América Latina?
—No
hay tal perfil por parte de la CIA. Eso sí, existen varios documentos
desclasificados respecto a Pinochet, incluyendo uno del Departamento de
Estado (1989) que dice que padecía de depresión y daba a entender que
sufría de esquizofrenia. De todas formas, respecto a Allende, en
distintos documentos se arma una imagen bastante ecuánime, por curioso
que parezca… Decían que era un hombre muy preparado, un político muy
culto y respetado, y con mucho carisma. Asimismo, destacaban las
críticas que le había hecho Fidel Castro por sus gustos "burgueses",
especialmente por la ropa fina.
Creo
que para la CIA el tema esencial no era Allende, sino la coalición de
la Unidad Popular, ya que tenían conciencia de que, más allá del
presidente había un poder político muy fuerte a sus espaldas: eso es lo
que les preocupaba.
—Existe
una famosa alocución del presidente estadounidense Richard Nixon
respecto a cómo desestabilizaría el gobierno de la Unidad Popular
mediante un plan que incluía “hacer gritar a la economía”. ¿Qué
instrucciones puntuales recibieron los funcionarios estadounidenses y
agentes de la CIA para llevar a cabo tal sabotaje?
—Las
instrucciones son muchas y dependen del período. En 1970, cuando se
quiso impedir la asunción de Allende, la CIA recibió, efectivamente, el
mandato de evitarlo al costo que fuera necesario. Para eso, fueron
diseñados dos planes de acción: el “Track I” y el “Track II”. El primero
buscaba cooptar y sobornar al Parlamento para que no ratificara a
Allende como presidente; el segundo era, derechamente, el empleo de la
vía militar.
Después,
en función de los documentos que conocemos -porque aún no se han
desclasificado todos-, sabemos que el foco principal fue subvencionar a
los principales partidos políticos de oposición, especialmente a la
Democracia Cristiana y, en menor medida, al Partido Nacional.
No
conocemos con detalle qué hizo la CIA al momento del golpe, pero sí
podemos decir, sin temor a equivocarnos, que conocía hasta el más mínimo
detalle de su planeamiento.
—¿Cómo
eran las relaciones entre los agentes de la CIA y la inteligencia
chilena? ¿Había un intercambio fluido de información o existían
resquemores entre ambas partes?
—Había
un intercambio muy fluido, especialmente entre los miembros de la DIA y
sus pares de las Fuerzas Armadas chilenas. Tengo la impresión de que,
mucho más que la CIA, entre 1970 y 1973 quienes manejaban información
más fina, precisa y exacta, eran los oficiales de la DIA, especialmente
por sus vínculos con la oficialidad chilena.
—Uno
de los casos más singulares de la vinculación de EEUU con el golpe
militar fue el asesinato del periodista Charles Horman, eliminado a días
del alzamiento por “saber demasiado”, luego de sus contactos –casi
casuales- con agentes de la inteligencia naval y la CIA que estaban
actuando en Chile. Tanto su país como Pinochet ocultaron toda evidencia
del caso. ¿Existe algún reconocimiento oficial de Washington de su
participación en el crimen?
—No
hay un reconocimiento explícito, pero sí -a lo menos- cinco documentos
desclasificados que permitieron a la justicia chilena solicitar a ese
país la extradición del oficial de inteligencia militar Ray Davis,
implicado en la muerte de Horman. Estos documentos relataban la
existencia de la llamada operación MCCHAOS, emprendida en conjunto entre
la CIA y el FBI y que buscaba información sobre norteamericanos que, en
distintas partes del mundo, eran tachados de radicales de izquierda,
tal como sucedió con otro estadounidense apresado con Horman: Frank
Teruggi.
—Si
la CIA pudo infiltrarse en la izquierda chilena ¿por qué no supo “leer”
las intenciones del régimen de Pinochet que acabaron en el atentado que
acabó con la vida del excanciller chileno Orlando Letelier (1976) en
Washington y que está considerado como el primer acto de terrorismo
internacional en suelo estadounidense?
—La
infiltración fue vasta hacia la ultraizquierda, no así hacia la
Dirección de Inteligencia Nacional (DINA). Por cierto, la CIA estaba
enterada al detalle de lo que ésta hacía en Chile, así como de sus
planes en el exterior, pero aparentemente no supo interpretar las
maniobras detectadas en Paraguay por el entonces embajador de EEUU,
George Landau, en orden a infiltrar personal de la DINA en ese país.
—¿De
qué manera Michael Townley, ciudadano estadounidense que ejerció como
agente de la DINA y fue uno de los autores materiales del crimen contra
Letelier se vinculaba con los agentes de la CIA en Chile? ¿Es efectivo
que trabajó para la agencia estadounidense?
—Michael
Townley nunca fue agente de la CIA. Esa es una mentira que inventó el
jefe de la DINA, Manuel Contreras -quien sí recibió pagos de la CIA,
algo que él niega pese a la documentación que lo ratifica- para tratar
de evadir su responsabilidad en el crimen de Letelier. Lo que sí es
efectivo es que Townley se ofreció varias veces a la CIA, pero nunca lo
tomaron en cuenta… La verdad es que, de hecho, no habría pasado ni
siquiera un simple examen psicológico. Era un sujeto excesivo, poco
discreto, de gran estatura (por lo que no pasaba desapercibido) y con un
afán desmedido por ser algo o alguien.
La Voz de Rusia presentará próximamente la continuación de esta entrevista al periodista chileno Carlos Basso, autor del libro La CIA en Chile. 1970–1973, en el marco de la conmemoración de los 40 años del golpe militar en ese país.
“Presidente Maduro: apagón fue un ensayo de golpe eléctrico”. Diario venezolano Ciudad Caracas, en su edición de hoy Miércoles, 04 de septiembre de 2013
Les
remitimos el enlace para conocer las noticias publicadas en el diario
capitalino venezolano Ciudad Caracas, en su edición de hoy Miércoles, 04 de septiembre de 2013.
http://www.ciudadccs.info/?p= 470539
Asimismo, los invitamos a visitar su página web: http://www.ciudadccs.org.ve/
En Portada: Presidente Maduro: Todo parece indicar que la extrema derecha retomó su plan de golpe eléctrico.
http://www.correodelorinoco.gob.ve/impacto/gobierno-no- descarta-que-falla-sistema- electrico-venezuela-sea-un- sabotaje/
Asimismo, los inivitamos a visitar su página web: http://www.correodelorinoco.gob.ve/
http://www.ciudadccs.info/?p=
Asimismo, los invitamos a visitar su página web: http://www.ciudadccs.org.ve/
En Portada: Presidente Maduro: Todo parece indicar que la extrema derecha retomó su plan de golpe eléctrico.
http://www.correodelorinoco.gob.ve/impacto/gobierno-no-
Asimismo, los inivitamos a visitar su página web: http://www.correodelorinoco.gob.ve/
TRANSPARENCIA ACTIVA
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Por una mayor y mejor democracia en El Salvador
El Blog de Salvador - Nuevo post |
Posted: 04 Sep 2013 06:30 AM PDT
A través del reconocimiento de sus derechos y deberes es que la población salvadoreña consolidará la democracia de nuestro país.
Gran parte de mi vida la he dedicado a la búsqueda y logro de un
mejor país. Soy honesto al decir que no busco beneficios personales, más
que hacer de El Salvador una patria con justicia social, en rumbo al
desarrollo y en gozo de una democracia plena.Yo sí creo que vivimos un tiempo nuevo y mejor, pero también sé que nuestra democracia aún es frágil y tiene mucho recorrido por delante hasta convertirnos en una sociedad prospera para todas y todos.
Estoy de acuerdo con quienes manifiestan que ir cada tres o cinco años a votar es reflejo de la democracia formal; sin embargo no lo es todo. Aún falta que se exprese más claramente en los campos de la economía, la distribución de la riqueza, el reconocimiento a los derechos de los pueblos originarios, el derecho humano al agua, a la igualdad de trato y la no discriminación en razón de género y más. Por eso digo que no sólo se trata de ir a votar.
Concibo que el Estado Social, Democrático y Constitucional de Derecho requiere de un programa en el que se profundice el aprendizaje del pueblo sobre el ejercicio de sus derechos y deberes, con valentía, con energía, con dignidad y sin reverencia a poderes ilegítimos como el que deviene del dinero, de la corrupción o del narcotráfico; situaciones que habiéndolas señalado condeno.
Lastimosamente hoy en día nos encontramos con grupos opuestos al desarrollo democrático de nuestra nación, cegados por el autoritarismo, las prácticas fraudulentas en lo político y lo tributario, los daños al ambiente y el irrespeto a derechos laborales. Ante esos grupos es que debemos entender que existe una exigencia para que se gobierne con un concepto amplio de democracia.
Te invito a que fortalezcamos el ejercicio pleno de soberanía del pueblo, que avancemos por lograr la justicia social disminuyendo la brecha de desigualdad generadora de pobreza y otros problemas sociales. Te invito a sumarte a los mecanismos de la representación política y de participación ciudadana.
Esa es la ruta por la cual deseo que la gente se pronuncie y participe activamente. ¿Estás de acuerdo conmigo? Permíteme hacerte una pregunta más: ¿cómo concibes tú la democracia de nuestro país?
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