cabildean al gobierno de Obama y los Clintons para que la invasión se del o máspronto posible.
Cuántos morirán o moriremos, cuántos se salvaran, esas interrogantes no tienen ninguna respuesta objetiva ante un posible holocausto y Armagedón, alfa y omega, principio y final al mismo tiempo y no es el temor a la muerte, sinotemor de la vida. La atmósfera y las fuentes naturales y la tierra envenenadapor las armas termonucleares y seguirse preguntando: es que la población de Babilonia, Persia y los Estados Unidos no tienen derecho a vivir, es que la humanidad tiene que agacharse ante las decisiones de los imperialistas fabricantes de armas, aquí no es cosa de gustos o esperanzas vanas en falsas religiones, aquí es la supervivencia de la especia a conveniencia colectiva.
Preguntémonos: cuántos han muerto en Irak, Afganistán, Gaza? Ésto pasa de lo grotesco y dantesco y no hay adjetivo que pueda describir lo que viene para la
humanidad. El imperialismo es capaz de destruir; pero no es capaz ni siquiera
de prevenir los desastres creados por ellos mismos. El horroroso derrame de
petróleo en el Golfo de México y el de Exxon Valdés en Alaska era prevenibles,
como lo era la inundación de New Orleans; pero les importó poco a los jerarcas y sabios de Sion y ahora que las playas de cinco estados se convierten en
cementerios de la vida marítima, salen con arreglos cosméticos y en nada
mencionan el tiempo que durará para recobrar la estabilidad del eco sistema, ni como harán para prevenir nuevos derrames o para limpiar las playas, no digamos para los millones de gente que hacían su vida en el mar y su litoral, jamás llegarán a comprender que hay situaciones desastrosas que no se resuelven con el papel moneda o con lo que éste puede comprar.
La historia los condena: se robaron más de la mitad de México, toda la vida han
querido manipular al mundo, han iniciado todas las guerras de la edad moderna, han cometido magnicidios, son los responsables de todos los golpes de estado en
el tercer mundo fueron los primeros y únicos en usar la bomba atómica y siguen usando armas químicas a lo largo de las guerras regionales de la tierra, al mismo tiempo de crear crisis económicas artificiales para seguir explotándolos
mercados del mundo.
La Enmienda Platt, el Tonkín, el reciente hundimiento del barco en Corea del
Sur, el golpe de estado en Chile en 1973, el golpe de estado en Guatemala en
1954, el golpe de estado contra Arístides, el golpe de estado en Honduras, Bahía Cochinos en Cuba, la guerra de la Contra en Nicaragua contra la joven Revolución Sandinista, la guerra civil salvadoreña, el financiamiento de escuadrones de la
muerte a lo largo de la tierra, las perennes manipulaciones de la ONU, OEA, FMI, la separación de la nación coreana, la Guerra de Viet Nam, el bloqueo
económico contra cuba, las provocaciones permanentes contra Venezuela, son nada más una ínfima parte de todos los males que han y siguen causando a la
humanidad.
Cuando los barcos nucleares de los terroristas imperialistas y sionistas se
desplazan militarmente en aguas iraníes, en el Golfo Pérsico y el Estrecho de
Ormuz, no lo están haciendo para ir de pesca turística, sino para atacar Irán,
guerra que traerá millones de muertos en la región y a nivel mundial, dado a la
radiactividad nuclear y total contaminación del Eco sistema, mientras tanto se
reúnen los poderosos en Toronto, Canadá y toman acuerdos que jamás conoceremos como público, los fanáticos del futbol asisten a una mascarada donde los árbitros ganan los partidos, ignorando al mismo tiempo, los horribles cuadros de
la población de Gaza quemada con napalm y fosforo blanco por el ejercito
sionista.
La humanidad está con más peligros que nunca. Las armas nucleares están prestas al holocausto humano. No sólo serán los iraníes y afganos, será la humanidad entera quien pagará el más alto precio del aventurerismo Sionista-Imperialista.
Recientemente fue capturado un terrorista salvadoreño en Venezuela,
paralelamente cuando otro terrorista salvadoreño protegido por el imperialismo trata de regresar al país como político, marcan la agresividad imperialista.
Cuando escribo este artículo nuestros hermanos y hermanas están siendo
asesinados en Aguan (Honduras) y a lo largo de Latinoamérica donde hacen
presencia criminal las mineras norte americanas.
Las noticias vuelan, la fuerza naval imperialista maniobra en aguas
costarricenses, contra quien, sino Venezuela y el mundo calla por temor el
tornado que se acerca. Espera Trágica como diría Benedetti, Dantesca, enfatizo
desde el laberinto existencial.
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