El jueves 20, la Asamblea
Legislativa aprobó con 54 votos, sin el apoyo de la fracción de Arena,
el Decreto Legislativo que cambia el nombre al Aeropuerto Internacional
a fin de dedicarlo a la memoria del Arzobispo Mártir, una iniciativa
promovida por el presidente Funes.
En
la edición 86 de su programa Conversando con el Presidente, el
mandatario anunció que esta develación se realizará el lunes por la
mañana, en el marco de la conmemoración del 34 aniversario del asesinato
de Monseñor Romero.
El
gobernante reiteró que Romero es el guía espiritual de la nación y la
inspiración de su gobierno, al expresar su convicción de que “El
Salvador tiene que crecer para reducir la pobreza y recortar la
desigualdad social, pero tiene que crecer también para dejar de ser un
país al servicio de unos cuantos”, como fue durante los gobiernos de
Arena.
El
jefe de Estado dijo que no quiere ver a un El Salvador al servicio de
pequeños grupos empresariales, ni viviendo en un estado de zozobra
económica, sino una nación con menos desigualdad en la que se favorezca
principalmente a los más pobres.
Desde el inicio de su mandato, el presidente Funes adoptó la
“opción preferencial por los pobres” que abanderó Monseñor Romero, como
la inspiración de cada una de las acciones de su gobierno, teniendo en
cuenta el enfoque de derechos humanos y la convicción de que el Estado
debe estar al servicio de la población que más lo necesita y no de
intereses corporativos.
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