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Salen a la luz pública más y más detalles escandalosos de la actividad de la Agencia de Seguridad Nacional de EEUU (NSA). Como se ha aclarado, los servicios especiales norteamericanos espiaban contra la sede de la ONU. En el verano del año pasado rompieron la protección y comenzaron a seguir las sesiones de comunicación vídeo de la ONU.
En
esto, la NSA violó burdamente el tratado de Washington con la ONU, que
prohíbe tales manipulaciones solapadas. La NSA espiaba asimismo contra
las representaciones de la UE domiciliadas en EEUU. Esto fue comunicado
por la influyente revista alemana Der Spiegel,
alegando los documentos recibidos de Edward Snowden. Hasta ahora no ha
habido declaraciones oficiales de parte de representantes de la ONU o de
Bruselas sobre la nueva porción de materiales comprometedores. Pero si
aparecen, tendrán un carácter meramente "ritual", como en los anteriores
desenmascaramientos de la actividad de la agencia, considera el experto
del Instituto de Relaciones Internacionales de Moscú, Alexánder
Tevdoi-Burmuli:
–Todos
están al tanto desde hace mucho que los norteamericanos espían contra
sus aliados, usando diferentes medios técnicos y los aliados les pagan
con la misma moneda. No hay nada nuevo ni extraordinario en esta
práctica. Los europeos, lisa y llanamente, se vieron obligados a
reaccionar a la publicación de dicha información, ya que salió a la luz
pública. Pero esta reacción estaba dirigida no tanto a Washington cuanto
a la ciudadanía europea.
Vale
la pena añadir que con anterioridad, gracias a Snowden, se supo que la
NSA intercepta en Alemania hasta quinientos millones de comunicados
telefónicos y de Internet, mensualmente. Tal y como se esclareció, esto
se hacía en base al acuerdo concertado por Alemania con Gran Bretaña y
EEUU ya en los años sesenta del siglo pasado. Sin embargo, la
envergadura de la actividad de los servicios especiales devino una
sorpresa incluso para las actuales autoridades de Alemania. Como
resultado, el acuerdo fue rescindido. Por lo demás, los hechos
destapados indignaron no tanto a los ciudadanos alemanes cuanto a los
partidos opositores, dice Vladislav Belov, experto del Instituto de
Estudios Europeos de la Academia de Ciencias de Rusia:
–La
sociedad recibió esto con crítica pero tranquilamente. No hubo
protestas en masa ni manifestaciones. La protesta pasó a la oposición
política y fue ajustada a la lucha electoral. Los correspondientes
partidos, en primer lugar el Partido Socialdemócrata de Alemania, los
Verdes, el Partido Pirata, La Izquierda, representados en el Parlamento,
emplean este escándalo para sus objetivos políticos.
De la publicación de Der Spiegel
se deduce asimismo que en abril último colaboradores de la NSA trazaron
una tabla en la que jerarquizaban la información relacionada a tal o
cual país o estructura internacional. Por ejemplo, el Organismo
Internacional de Energía Atómica recibió el grado máximo: 1. Como se
supo, la NSA implantó canarios en la sede de esta entidad en Viena. La
UE obtuvo el índice 3. La NSA se interesaba en primer lugar por la
estabilidad financiera de la UE, las relaciones comerciales y la
política exterior. En lo que atañe a diferentes estados, el índice 1 lo
recibieron: China, Irán, Corea del Norte y Rusia. Pero de ello no dimana
que Washington sitúe a Moscú entre los enemigos más probables. Señala
Alexánder Tevdoi-Burmuli:
–En
la práctica de cualquier servicio especial y de cualquier estrategia de
seguridad nacional habrá siempre una distribución de prioridades. Hay
países que pertenecen, más bien, al número de socios y hay otros, que
quizá no sean una amenaza directa, pero, en virtud de su importancia
geopolítica y geoeconómica son rivales. En este sentido Rusia no está en
la cima de las prioridades estratégicas norteamericanas. China, empero,
es para EEUU la figura número uno, a la que se debe "observar". Pero
Rusia, por cierto, estará en la lista de prioridades porque es una
potencia nuclear, miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU,
un gran país, etc.
Entretanto,
se conocieron pormenores sobre el propio filtrador Snowden. El fugitivo
no se proponía hacer una parada en Rusia porque su intención era
obtener asilo en Cuba o en otro país latinoamericano. En el consulado
ruso mostró incluso un billete hasta La Habana, que confirmaba su
propósito de usar Moscú tan solo como un punto de tránsito y no como el
punto final de su viaje. Sin embargo, EEUU ejerció tanta presión a los
países que podían recibirlo que ellos se negaron. Como resultado,
Snowden quedó bloqueado en el aeropuerto moscovita y se vio constreñido a
pedir asilo político en Rusia.
vs/lj/sm
Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción de La Voz de Rusia.
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