VOLVER A SER NIÑO

VOLVER A SER NIÑO

 
 

A la infancia de mi amada Farabunterra!

Quizá nunca maduré y es mejor que así haya sido.

 Tuve una niñez feliz trabajando con mis padres y 

viviendo con los niños de mi pueblo. Nada de qué 

quejarme, nada de arrepentirme. Desde muy niño 

trabajé como hombre y a las cinco de la mañana ya 

estaba ordeñando y peregueteando en pelo 

caballos chúcaros, que montón de veces me dejaron 

trabado en los piñales y cercos de los potreros.

Por el trabajo siempre fui el último en llegar a la escuela con la botas sucias, que es todavía la escuela que más amo, en ella los maestros eran nuestros segundo padres y nos castigaban duro, más que todo a quien escribe por malcriado e insurrecto. Mis mejores amigos, los pocos amigos que tengo son los que fueron mis compañeros y compañeras de escuela, sus padres también eran mis padres y así los míos con ellos.

Por ello, para no enredarme en el laberinto de los adultos, cada día vuelvo a ser niño.

                COMO LOS NIÑOS

Como los niños me iré a jugar con las estrellas
A pintar mañanas bellas con los niños
A hacer palacios en la playa con los niños
Y a vivir con ellos el ensueño de los niños.

Como los niños recomenzaré el aprendizaje de la vida
Aprenderé a pedirle a la tierra sus frutos escogidos
Para los otros niños y como los niños
Me pelearé por los frutos de la vida
Y sabré compartir la esencia de los mismos.
Como los niños esperaré las primeras tormentas
Para correr chapaleando entre mil goces
iré a los templo buscando la verdad
Del amor, de ángeles y dioses.

Como los niños elevaré barriletes y piscuchas
Lloraré si se escapan de mis manos
Soñaré que vivo en una patria
De hadas madrinas, de frutales sin dueño
Una patria de ensueños.

Jugaré mica, trompo, escondedero
Una dos tres para mí y aprenderé
A sonreír si llego de último
Y a saltar si llego de primero.
Como los niños daré amor
Daré cariño
Sin importar ser correspondido
Y como los niños doy gracias eternas
De ser niño y de haber nacido.