Indignados de 34 países de europa manifiestan contra el Capitalismo

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Miles de “Indignados” han tomado las calles de las principales ciudades de 34 países en una protesta global convocada por el “15-M”, en el marco del primer aniversario de este movimiento nacido en la plaza Puerta del Sol en la capital española, Madrid, contra el capitalismo, las corporaciones, los políticos y los recortes económicos en medio de una crisis, que afecta al “99 por ciento” de las poblaciones.

Europa ha sido el principal escenario de múltiples protestas. Las réplicas se han sentido también en Asia y América.
La plaza Puerta del Sol fue el epicentro de esta protesta global, pues allí el 15 de mayo del 2011 se generó el movimiento 15-M, que protagonizó una extensa acampada en protesta contra las medidas económicas y los políticos españoles, que afectaba en primer término a la población joven y los distintos sectores de la sociedad.
El ciudadano de a pie, considerado por el movimiento el 99 por ciento de los afectados por las crisis económicas que se han generado a partir del 2008, producto por la debacle del capitalismo -según algunos analistas- ha tomado la iniciativa de alzar la voz para reclamar sus derechos. Estos son los representados por el 15-M.
Las redes sociales como Twitter y Facebook han sido las herramientas más utilizadas por los indignados en el mundo, para convocar a las protestas e informar sobre los incidentes en todo el mundo. En la 2.0 se conoce como “#12M15M”.
Más de 80 ciudades españolas han sido tomadas por el movimiento. Las principales -Madrid y Barcelona- seguían desbordadas por miles de indignados pasada la media noche, desafiando al gobierno que impuso un límite de tiempo para la protesta -22H00 horas local (20H00 GMT)- y estableció un amplio dispositivo de seguridad para controlarla.
Las movilizaciones se llevaron a cabo en un ambiente lúdico y sin incidentes. Los manifestantes coreaban consignas como "lo llaman democracia y no lo es", "el pueblo, unido, jamás será vencido" o "pueblo, despierta, se acabó la siesta", mientras que otros portaban carteles con las frases "banquero ayudado, ladrón indemnizado", "A nosotros ¿quien nos rescata?", además de otras contra los recortes en la educación y la sanidad pública, y contra la reforma laboral.
París

En París, capital de Francia, se llevó a cabo una gran movilización de indignados este sábado.  Las movilizaciones inicaron en la mañana y se extendieron hasta la noche, realizando actividades lúdicas y concentraciones en diferentes puntos de la ciudad.
En esta capital también se mantuvo un fuerte cerco policial para controlar excesos. Sin embargo, la manifestación transcurrió sin incidentes.
“Los organizadores leyeron, además, un texto en el que recordaron que 'han florecido en el mundo entero, movimientos sociales y ciudadanos, horizontales, solidarios y no violentos para exigir y construir una democracia real'", reseñó una agencia de noticias.
Bruselas

La capital de Bélgica, Bruselas, de una población de más de un millón 120 mil personas, según el censo del 2010, también fue escenario de manifestaciones en este “Mayo Global”.
Centenares de personas, en su mayoría belgas y españoles residentes en la capital belga, marcharon por las calles y manifestaron frente al Banco Nacional belga y el Palacio de Justicia, entre otros espacios, como la  Porte de Hal -una de las puertas de la antigua muralla medieval que rodeaba la capital belga-, donde concluyó la movilización con la realización de diversas asambleas.
“Somos el 99 por ciento” coreaban los manifestantes, en referencia a los más afectados con las crisis económicas.
El español Gonzalo Amandi, residenciado en esa capital, afirmó que "deja bien claro que la mayoría somos los que pagamos la crisis, mientras que el 1 por ciento son los que se están aprovechando y ganando dinero con ella", citó una nota de prensa.
Londres
En la ciudad capitalina de Londres, Inglaterra, la movilización también se realizó sin inconvenientes.
Los organizadores convocaron a los indignados con sus respectivas tiendas de campaña, para intentar realizar una acampada.
La protesta pacífica a los pies de la catedral de San Pablo, en pleno distrito financiero de la City. Seis meses atrás la policía desalojó una acampada de protesta tras una larga batalla legal.
En esta capital visitaron bancos, fondos de inversión y compañías privadas, pues consideran que éstas representan el 1 por ciento "que ocasionó la crisis económica y continúa beneficiándose de ella".
Lisboa

Otra capital europea tomada por los indignados es Lisboa, Portugal, que entre otras seis ciudades sirvió de escenario para la protesta contra las políticas de austeridad y la precariedad laboral.
Bajo el lema “Indignación y Cambio” casi un millar de personas se movilizaron “de la plaza lisboeta de Rossio y desfilaron con pancartas, tambores y bocinas por la Avenida Liberdade”, reseña una agencia de noticias.
“Los manifestantes corearon consignas en alusión al 'movimiento de los indignados' en los países del sur de Europa, con gritos como 'España, Grecia y Portugal, la lucha es internacional'", añade la nota.
Atenas

Grecia es uno de los países europeos más golpeado por la crisis europea. Sin embargo, en Atenas se registró una de las manifestaciones menos multitudinarias del continente, según agencias de noticias.
Argumentan que “la fragmentación política y los problemas para formar el nuevo Gobierno centran desde el pasado domingo toda la atención de la opinión pública”.
Asia

En el antiguo continente se sintió la protesta de los indignados en Israel y Corea del Sur.
Centenares se manifestaron en Tel Aviv, el principal centro económico y financiero; donde marcharon hacia la plaza Rabín. Además, se han concentrado en Jerusalén oeste, Haifa (norte) y Eilat (sur).
Asimismo, en el territorio palestino ocupado por Israel de Jerusalén Este, una veintena de personas, en su mayoría españoles, se manifestaron frente a la sede del Consulado General de España con pancartas en las que se leían lemas como "No + gente sin casas ni + casas sin gente", "Somos el 99%" o "Nadie gana a no ser que todos ganemos (en inglés)".
“En Corea del Sur, el movimiento de indignación ciudadana reclama 'con total firmeza y de un modo no violento la justicia social, la distribución de la riqueza y una ética pública', así como condenar 'la pobreza, la desigualdad, la devastación medioambiental y la corrupción como herramienta de sometimiento de los poderosos sobre las sociedades'”.