http://www.contrainjerencia.com/?p=76303
El periodista y creador de Wikileaks, Julian Assange, afirmó
ayer que casi la totalidad de las comunicaciones desde América latina
pasan por Estados Unidos y que este país utiliza el espionaje de éstas
para afianzar su influencia en el mundo. “El 98 por ciento de las
telecomunicaciones desde América latina al resto del mundo, incluidos
mensajes de texto, llamadas telefónicas, correos electrónicos, etc.,
pasa a través de Estados Unidos”, señaló Assange. “El objetivo de
Wa-shington es obtener información de cómo América latina se comporta,
hacia dónde se mueven las transferencias económicas y las actividades de
los líderes y actores clave”, agregó en una entrevista concedida a un
canal de televisión ruso desde la Embajada de Ecuador en Londres.
Según Assange, ese espionaje permite a Washington predecir el comportamiento de los líderes e intereses latinoamericanos y también presionar a cualquier persona importante. “Estados Unidos ha intentado agresivamente impedir el intercambio económico a través de la intervención y el control de Swift, Visa, MasterCard o el dinero enviado hacia América latina mediante el Bank of America”, aseguró. “Estados Unidos se está apropiando de las interacciones económicas y de las telecomunicaciones, y lo que queda es un cierto control de la fuerza física del Estado”, añadió. Assange manifestó que el interés de Washington por América latina estuvo un poco aplacado durante la primera década del siglo XXI y se inclinó más hacia Medio Oriente, no obstante ahora ha vuelto a fijar su vista en la región. “En ese período, varios países latinoamericanos han desarrollado y hecho crecer su independencia respecto de los intereses de Estados Unidos. Y ahora, desafortunadamente, Estados Unidos está volviendo a interesarse por América latina”, dijo.
Además, Assange consideró que es necesario construir una soberanía tecnológica para combatir el espionaje de Estados Unidos. “No hay una soberanía efectiva sin la soberanía de los elementos necesarios: interacción económica, telecomunicaciones e instrumentos de control policiales y judiciales”, sentenció.
En relación con el ex técnico de la CIA Edward Snowden, que vive en Rusia asilado después de haber revelado una trama de espionaje masivo de los servicios secretos de su país, Assange señaló que Wikileaks estuvo implicado de modo formal e informal en las solicitudes de asilo de Snowden en alrededor de 20 países. “En algunos casos porque pensábamos que había una posibilidad real con esos países y en otros porque queríamos que el público viera que había un rechazo y generar un cierto debate público y que hubiera testigos de cómo se estaban comportando los gobiernos”, contó.
El fundador de Wikileaks recordó que fueron Venezuela, Bolivia y Ecuador los países de Latinoamérica que mostraron interés en otorgar asilo a Snowden.
Por otro lado, aseguró que los filtradores de archivos secretos como él y Snowden reciben el trato de los Estados Unidos como terroristas. “El presidente Obama ha llamado ‘excepcionalidad de Estados Unidos’ a este tipo de persecución y actitud hacia los filtradores y los medios que trata como a terroristas. Cuando un presidente habla sobre excepcionalidad lo que está tratando de decir es que a su país no se le aplican las reglas del comportamiento civilizado, tanto en el caso de invadir otro país o abusar de la ley en su propio territorio”, sostuvo.
PAGINA12
Según Assange, ese espionaje permite a Washington predecir el comportamiento de los líderes e intereses latinoamericanos y también presionar a cualquier persona importante. “Estados Unidos ha intentado agresivamente impedir el intercambio económico a través de la intervención y el control de Swift, Visa, MasterCard o el dinero enviado hacia América latina mediante el Bank of America”, aseguró. “Estados Unidos se está apropiando de las interacciones económicas y de las telecomunicaciones, y lo que queda es un cierto control de la fuerza física del Estado”, añadió. Assange manifestó que el interés de Washington por América latina estuvo un poco aplacado durante la primera década del siglo XXI y se inclinó más hacia Medio Oriente, no obstante ahora ha vuelto a fijar su vista en la región. “En ese período, varios países latinoamericanos han desarrollado y hecho crecer su independencia respecto de los intereses de Estados Unidos. Y ahora, desafortunadamente, Estados Unidos está volviendo a interesarse por América latina”, dijo.
Además, Assange consideró que es necesario construir una soberanía tecnológica para combatir el espionaje de Estados Unidos. “No hay una soberanía efectiva sin la soberanía de los elementos necesarios: interacción económica, telecomunicaciones e instrumentos de control policiales y judiciales”, sentenció.
En relación con el ex técnico de la CIA Edward Snowden, que vive en Rusia asilado después de haber revelado una trama de espionaje masivo de los servicios secretos de su país, Assange señaló que Wikileaks estuvo implicado de modo formal e informal en las solicitudes de asilo de Snowden en alrededor de 20 países. “En algunos casos porque pensábamos que había una posibilidad real con esos países y en otros porque queríamos que el público viera que había un rechazo y generar un cierto debate público y que hubiera testigos de cómo se estaban comportando los gobiernos”, contó.
El fundador de Wikileaks recordó que fueron Venezuela, Bolivia y Ecuador los países de Latinoamérica que mostraron interés en otorgar asilo a Snowden.
Por otro lado, aseguró que los filtradores de archivos secretos como él y Snowden reciben el trato de los Estados Unidos como terroristas. “El presidente Obama ha llamado ‘excepcionalidad de Estados Unidos’ a este tipo de persecución y actitud hacia los filtradores y los medios que trata como a terroristas. Cuando un presidente habla sobre excepcionalidad lo que está tratando de decir es que a su país no se le aplican las reglas del comportamiento civilizado, tanto en el caso de invadir otro país o abusar de la ley en su propio territorio”, sostuvo.
PAGINA12
No hay comentarios:
Publicar un comentario