Foto: RIA Novosti
La pesca de esturiones en el mar Caspio se prohibirá por cinco años. Tal como se espera, la resolución al respecto puede ser tomada en la cumbre de jefes de Estado del Caspio en septiembre.
Algunos expertos opinan que la medida permitirá evitar la desaparición de esos peces.
La
propuesta de imponer una moratoria a la pesca de esturiones en el
Caspio fue expuesta en noviembre de 2010 en la cumbre de Bakú. Cuatro de
los cinco países que tienen salida al mar Carpio –Rusia, Azerbaiyán,
Kazajstán e Irán– estaban dispuestos a establecerla de inmediato. Pero
Turkmenistán se pronunció en contra de tal decisión. En palabras del
director del Centro de Relaciones Públicas de la Dirección General de
Pesca de Rusia Rosribolovstvo, Alexánder Savéliev, por fin se logró
acordar la imposición de la moratoria.
–Desde luego
que para facilitar la recuperación de la población de los esturiones
todos los países del Caspio deben implantar la moratoria. Por eso
esperamos que en la próxima cumbre la cuestión se decida
definitivamente. Ahora, por lo menos, no existen contradicciones. La
postura de Turkmenistán ha cambiado. Pienso que próximamente la
moratoria será establecida. De tol modo ayudaremos restablecer la
decreciente población de los esturiones.
La
situación de los esturiones es crítica. En los últimos diez años el
número de belugas (esturión blanco), de esturión bastardo (Acipenser
nudiventris), de sevrugas (Acipenser stellatus) y esturión propiamente
dicho en el mar Caspio disminuyó, según los cálculos más modestos, en
30-40 veces. Se los pesca por su molla y su caviar negro, que en muchos
países se considera como uno de los manjares más caros.
Para
conservar de alguna manera la población de los esturiones Rusia en 2002
impuso de forma unilateral una moratoria a la captura de esos peces.
Actualmente la pesca es posible solo con fines científicos. Por otra
parte, las granjas de cría artificial de esturiones se desarrollan
activamente. Científicos rusos elaboraron un método único de obtención
de caviar de peces vivos. O sea que aprendieron a “ordeñar” los peces.
Una parte de las huevas se destina para la cría de alevines en piscinas
especiales. Cuando los alevines se vuelven más grandes se los suelta a
su medio natural. La otra parte se utiliza para la producción del
manjar. Dicho sea de paso, el caviar del esturión criado artificialmente
no se diferencia en lo más mínimo del natural. Al menos, incluso los
gastrónomos más exigentes no lo distinguirán por el sabor. Sea como sea,
pero los precios igualmente siguen siendo muy altos. En los mercados
europeos pueden ascender a varios miles de dólares por kilogramo. Pero
esto estimula la pesca ilegal. La pesca ilegal masiva es el problema más
grande para el esturión, estima el coordinador jefe de los proyectos
del programa TRAFFIC del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) de
Rusia, Alexéi Vaismán:
–Los esturiones del Caspio
se encuentran en una situación penosa como resultado de la pesca ilegal
masiva, que prolifera en Rusia, Kazajstán, Azerbaiyán, Turkmenistán y
hasta en Irán. La gente salió al mar empujada por el desempleo masivo.
La gente simplemente no tiene de que vivir. Durante este tiempo creció
una generación que no conoce ningún otro trabajo.
Los
expertos consideran que si todos los países del Caspio acuerdan la
imposición de una moratoria total, pues la población de esturiones se
restablecerá muy pronto. Según evaluaciones hechas por científicos
rusos, ahora en el Caspio del Norte hay suficientes alevines de
esturión. Y, dentro de cinco años, se podrá hablar del inicio cauteloso
de la pesca industrial. Solo hay que dejar que la naturaleza descanse en
poco.
Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción de La Voz de Rusia.
mj/kg
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