Hoy, hace
37 años, el mundo veía atónito y perplejo pero con alegría como el
heroico pueblo de Vietnam derrotaba política-militarmente al
Imperialismo Yanqui, se trataba de la toma de la ciudad de Saigón (Hoy,
Ciudad Ho Chi Minh), capital de lo que los gringos habían demarcado como
Vietnam del Sur, como formula imperial de dividir para triunfar, de
aquel histórico momento existen fotos emblemáticas cuando gringos y
lacayos huyen despavoridamente ante el avance del ejército de liberación
nacional del Vietnam del Norte (Vietcong) o cuando un tanque de
fabricación rusa de los liberadores entra en la casa del gobierno
títere, con ello concluía 40 años de lucha épica de este heroico pueblo,
que lucho en contra del imperialismo Japonés, y lo derrotó, lucho en
contra del imperialismo
Francés, y lo derrotó y luchó en contra del imperialismo yanqui, el más
grande y sanguinario de todos los imperios de todos los tiempos y lo
venció.
Ahora bien,
independientemente, de la naturaleza heroica del pueblo vietnamita y la
correcta dirección del camarada Ho Chi Minh (El tío Ho), que hace a ese
pueblo tan especial, quien por cierto hoy en día no lucha mucho y
sobretodo no ayuda a otros a luchar, como lo ayudaron a él, y tiene un
gobierno bastante seducido por el neoliberalismo (A pesar de estar bajo
la misma dirección del partido del tío Ho), y casi es de los denominados
“tigres asiáticos”, en donde existe la maquila gringa y europea como
arroz, repito, que hizo a ese pueblo del lejano oriente dar esas
batallas tan heroicas y triunfar.
Indiscutiblemente,
que hubo un factor que fue decisivo, y fue el movimiento comunista
internacional. Vietnam, al igual que Corea y otras naciones del este
europeo (Estas no corrieron con mejor suerte), son producto de la
solidaridad internacional comunista; el movimiento comunista aunque, en
la última etapa de Vietnam ya se había resquebrajado, este aun mantenía
buenas relaciones con la URSS y con la China Popular, que todavía era
dirigida por el gran timonel, el camarada Mao Tse Tung, esto se
manifestaba no solo en ayuda económica, expresada en alimentación,
vestido, tecnología para su industria, sino en dotación de armamento de
punta y entrenamiento militar; los misiles tierra aire, que era lo más
moderno de los años 60-70, tumbaban a los helicópteros y aviones
yanquis, cuestión esta que
casi igualaba a un ejército de un país de la periferia, o del tercer
mundo como se decía en aquella época, con el ejército imperial
todopoderoso gringo.
La
guerrilla Colombiana e Iraq, para colocar dos ejemplos actuales, no han
tenido esa ayuda, que tuvo el Vietcong de sus heroicos años 50-60 y
hasta el 75 del siglo pasado; los gringos van en sus carros blindados y
con ayuda de la aviación y la tecnología de punta, a larga distancia,
inclusive en sitio bien lejano o fuera del espacio, arremeten contra
cualquier población y entran en cualquier casa en horas nocturnas,
cuando no es bombardeo que cae del cielo, y ellos ni sienten los aviones
y desaparecen una aldea entera en la actual Mesopotamia, una de las
madres de la civilización humana. De haber contado, la resistencia
Iraquí con armamento sofisticado, a la par del que le dotaron rusos y
chinos, en los 60 y 70, al Vietcong, un Sunita, estaría esperando con
rayos infra-rojos al pelotón agresor
gringo para hacerlo desaparecer con un misil tierra-tierra y volar en
mil pedazos su Hummer o blindado, o un misil patriot o tierra aire,
hubiese neutralizado, gran parte de ese arsenal de bombas que destruyó a
Bagdad y la infraestructura de la Babilonia, y hace rato que el del
imperio Nor-Atlántico (Otánicos), hubiesen puesto los pies en polvorosa
de ese heroico país, quien prácticamente con palos y piedras y simples
fusiles (Ante un misil, un avión o helicóptero, equivalente a un palo o a
una piedra), al igual que el Talibán de Afganistán, los está derrotando
y haciendo que vuelvan a sus casas con el rabo dentro de las piernas.
La guerrilla Colombiana, también sufre los embates de un ejército
beduino o primitivo frente a un poderosos y sofisticado ejercito gringo,
como el Colombiano, comandado, subsidiado y armado por yanquis.
Venezuela debería poner las barbas en remojo.
CHINA Y RUSIA DEBEN TOMAR CONCIENCIA DEL PELIGRO QUE IMPLICA UN IMPERIO FORAJIDO COMO EL NOR-ATALNTICO
Mientras esté la OTAN, con USA a
la cabeza, vigente, no habrá paz en la humanidad y el mundo será un
mundo inseguro, en donde el desarrollo económico del pueblo chino y
ruso, no sirve para nada porque en cualquier momento Washington aprieta
el gatillo. Pero afortunadamente, y sobretodo
los hechos aunado al sentido común, los está conllevando a tener
alianzas estratégicas en materia militar, y desde hace una semana, ambos
ejércitos se encuentran en maniobras conjunta en el mar amarillo del
extremo oriente.
El error
garrafal que cometieron en Libia, no debe volverse a repetir y deben
ayudar a movimientos de liberación que con palos y piedras pelean solo
en contra del ejército pirata Otánicos que los descuartiza en África y
deben colaborar con movimientos de liberación nacional o de resistencia
legitima, como la guerrilla Colombiana dotándolas de un armamento que
les permita sobrevivir frente al embate colonial gringo, tal y como los
gringos y europeos promueven terroristas en Afganistán (En varias
épocas, como cuando la URSS en los 80, son los creadores del Talibán y
Al Qaeda), Libia, en donde promovieron la organización terrorista de
falsa bandera Al Qaeda y ahora en Siria e Irán y en todo mundo musulmán
ex-soviético (Chechenia) y en el Tíbet Chino, y sus Hummer y blindados
no se pararan en
Teherán o Pyongyang sino que trataran, por todos los medios de
estacionarse en Beijing y Moscú, como sus últimos trofeos, y después
vendrían, al pensar de la mafia que dirige al mundo en la ciudad de New
York, un milenio de oscuridad.
Pero nada
de lo dicho anteriormente pasará puesto que el imperialismo yanqui en
los años 30 de este siglo XXI, será historia, este mundo, está
despertando, y otras décadas perdidas como la de los 80 y 90 y otro
siglo perdido como el XX, no volverán jamás, que fue lo que pasó después
de aquel heroico 30 de abril de 1975, en donde ya se veía inminente la
caída del capitalismo, y no fue así; ya el mundo aprendió la lección y
se vacunó en contra del capitalismo, en los últimos 37 años; ya se sabe
qué hacer, como hacerlo y a donde ir.
Francisco Sierra Corrales
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