CARTA A DON PONCIANO,

LAS MALDADES DE LA DERECHA .

Fijate Ponciano que me fui a zampar a dos pueblos por este volado de las elecciones que casi me deja sin calzones y vieras que arrepentido vengo de haber sido testigo del espectáculo más grotesco de lo que son las elecciones antidemocráticas de este paisito de mierda donde me tocó nacer y donde me toca votar de vez en cuando y cuando tengo un par de dólares para el pasaje.

Putas Ponciano, por tus putas recomendaciones de ir al lugar de los hechos me fui a zampar a ese horroroso espectáculo desolador que vos llamas elecciones que no llegan siquiera a contracciones democráticas, sino una burla al pueblo y a su inteligencia nata.

Jamás había visto y vivido una bufonada como la reciente y todo por culpa tuya semejante cabrón que solo para engancharme servir y nunca había sentido tanta cólera y vergüenza de ser pobre al ver a estos hijos de mil putas areneros comprando los votos por mendrugos.

Hay Ponciano, solo me recorde de auella estrofa que nos enseñaste: "en el tiempo de las bárbaras naciones, de las cruces colgaban los ladrones, pero ahora en el siglo de las luces, del cuello del ladrón cuelgan las cruces". Ahora comprendo porque no querés a los sotanudos, fíjate que en ese pueblo de mierda al que fui, en plena misa y con las campanas doblando por los que se habían muerto y seguirán muriéndose de hambre y quizá por pendejos, el muy hijo de la gran puta del cura dijo: Cuidadito feligreses, cuidadito con votar por los colorados enemigos de Dios.


Mirá Ponciano, me daban ganas de irlo a agarrar del pescuezo y ahorcarlo en el campanario como el cura de tus cuentos y bueno, de pendejo me traban de vigilante sin sueldo por el partido de los rojinoles y aquí te relato sin intención de dañar a nadie sobre lo que vi: Esos hijs de puta de ese pueblo han hecho de la constitución una prostitución, ahí dice que el voto es libre, directo y secreto, en ese pueblo que putas, Don Elmo Nudo, un viejito que habían ido a sacar de la tumba, un arenero grito como a media cuadra, don Elmo dice que va a votar por Arena y bueno, sale un arenero de la mesa y marca la bandera de Arena, después llevan a una viejita con demencia, con parkinson como que iba tocando violín y grita el mismo cabrón: La Amparito dice que va a votar por arena y el caso se repite como cincuenta veces y los rojinoles pendejos amen que asi les den.

Como a las tres de la tarde apareció una mara de cabrones mareros tatuados hasta del culo y todos usando camisetas blancas y dijeron que ellos venían a votar en la mesa y todos por ARENA y en la mesa de tal forma que la secretividad del voto valió verga y dijeron que treinta dólares valían más que cualquier bandera roja. Puta Ponciano, que circo mas mierda y ahí mismo me jure jamás volver a votar o a servir en las mesas nunca jamás en mi puta anti vida.

Ni está bien Ponciano que nuestra gente sea pobre, hambrienta e ignorante y da verga que por un par de pesos compren su voluntad. Te pido de favor Ponciano y anda mucho a la mierda, Jamás, oí bien, jamás en tu puta vida se te vaya antojar invitarme a otra payasada como la del once, allá vos si te gustan esos circos, yo me considero una persona decente y no me gusta de ninguna forma que irrespeten mi sabiduría y todavía una maishtra tiene los chinastes para invitarme a una muestra de democracia, vaya que sin gracia!

Pedro Cantor

El Pendejo de San Salvador