Después de verlo y oírlo por TV. He releído y analizado el Discurso de Mauricio que ya hace historia a nivel nacional e internacional.
Algunos se preguntan, pero es verdad lo que dijo? Y que no lo oíste, les respondo, pero cuál fue su intención, dicen otros, bueno; les contesto, la intencionalidad del discurso es producto del fenotexto y la interpretación que tu le quieres dar es tu decisión ya que los paratextos vivirán contigo y es mejor no hablar mucho de subyacencia si lo que está a la vista no quiere anteojos.
“justicia que busque y promueva la verdad. Justicia que otorgue resarcimiento; justicia que acabe con la impunidad; justicia que genere igualdad de oportunidades y contribuya a erradicar la pobreza; que reconozca derechos por igual al de abajo y al de arriba, al hombre y a la mujer, al que lo tiene todo y al que no tiene nada o casi nada.
En suma: justicia en igual medida para todos y todas”.
Si se analiza el párrafo anterior podemos ver la profundidad de la intencionalidad y nadie que no tenga dichas intenciones podría convencernos de que está diciendo y buscando la verdad, como Mauricio lo ha hecho y claro, las respuestas, opiniones y acusaciones vendrían después del mismo discurso. Así, las personas sobrias expresan que nadie había tenido el valor y la solvencia moral de ir hasta el lugar de los hechos, pedir perdón en nombre del estado y prometer justica para los caídos y sus sobrevivientes, en todas las manifestaciones posibles de justicia. Otros, los de costumbre, los perpetradores de crímenes de lesa humanidad dicen que el Presidente hubiera buscado un lugar neutral, neutral para quién? Cuando uno no debe nada, cuando se tiene la conciencia limpia no importa donde se hagan las denuncias. Otros dicen que ésto viene a reabrir heridas y quién dicen que están cerradas? No será que los perpetradores quieren que se haga de este crimen borrón y cuenta nueva.
El pueblo esta gritando: queremos toda la verdad, no una verdad particular, sino universal, sintética y analítica porque mientras no la conozcamos más mal nos estaremos haciendo como sociedad, no solo queremos recordar y honrar a nuestros caídos, sino procesar a los responsables impunes hasta el momento de todos los crímenes de guerra y de post guerra. No es sólo el Mozote, está el Calabozo, Sumpul, Copapayo, Tenango y Guadalupe, San Francisco Echeverría, Santa Marta y todas las masacres perpetradas contra nuestro sufrido y heroico pueblo, no buscamos venganza, sino justicia para todos y todas y de esa manera quizá podamos comenzar a cerrar la Herida Nacional que sangra día a día.
Dio hasta frio y conmovió ver a un presidente llorar ante su pueblo, un discurso que cambió la faz de la justicia sobre nuestra patria. La impunidad comenzó a morir temblando desde el 16 del 2012 las hienas tiemblan y lanzan zarpazos en su derrota, un nuevo sol alumbra nuestra patria.
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