CULTURA NACIONAL

CULTURA NACIONAL

Sin la creación solo existe la nada y la nada es nada, aunque Hegel, Sartre y Heidegger se hayan equivocado sustantivándola. (Paul Fortis)

Cuando veo mi patria en mi diaria y permanente trashumancia y vivo las diferentes manifestaciones de la Cultura Nacional me pongo a pensar en el inmenso trabajo que debe hacer la Secretaria Nacional de Cultura para saber dirigir e incorporar no sólo a los y las artistas, sino a la ciudadanía en general para que puedan gozar y disfrutar sabiamente la máxima expresión del pensamiento salvadoreño contenido en las diferentes manifestaciones artísticas.

En nuestro país crece una generacion de poetas, cantantes, pintores, artesanos, teatristas, músicos a los que hay que saber formar sistemáticamente y ayudarles en su producción y exposición de su obra.

Mis largos años de estudio incluyen una Maestría en Artes con especialidad en el Teatro Grotesco, lo que me puso en contacto con Luigi Pirandello y la Generacion Argentina del Teatro Neo grotesco, Gámbaro, Pavlosky, Dragún, Cossa , entre otros y quizá mi formación como poeta y cuentista me lleven a desvelarme cotidianamente y actuar diariamente en el Teatro de mi Vida buscando formas como ayudar a las presentes y futuras generaciones de artistas salvadoreños.

La creación nos lleva a ser incomprendidos, criticados, ultrajados, reprimidos, olvidados, excluidos, acusados, secuestrados, torturados, asesinados, pero ese es el precio que se tienen que pagar por ser libres artísticamente hablando, sin embargo; el verdadero artista es aquel o aquella revolucionaria (para ser creador se debe ser revolucionario) a quien no le importan desvelos, limitaciones económicas, desprecios y todo el bagaje de improperios que el bestiario anti artístico nos pueda lanzar en el esfuerzo de su producción artística.

No es cosa de tratar de apartar el arte popular, al contrario, se trata de que se realice por medio de su expresión, se trata de formar a las nuevas generaciones con lo que las viejas generaciones han aprendido a base de esfuerzo y de golpear cotidianamente el yunque artístico casi o totalmente sin ayuda del estado o instituciones privadas.

Un pueblo sin arte es la expresión de un cementerio donde yace el sueño de los injustos con pesadillas justas por no haber hecho al paso por la tierra lo que supuestamente debieron haber hecho.

El Ser Para Si está supuesto a proyectar y producir, jamás debemos ser minimalistas o excluyentes, de ahí mi desprecio por el arte elitista (para la sociedad en el poder ) creador de diz que “Vacas Sagradas” que no pasan de ser vacas sangronas rumiantes del sistema y de viejas perogrulladas seudo artísticas, despreciables que tanto mal han hecho a las generaciones que aparecieron después de sus reinados de rastrerismo y lameculismo servilista descarado.

Como Derrida, Umberto Eco, Saussure, Noam Chomsky, pienso que quienes dirijan las oficinas encargadas de la Cultura Nacional i.e., deben saber que la inversión en la cultura es la mejor inversión que se puede hacer en los pueblos y que tomando en cuenta a los grandes maestros arriba mencionados, la herencia cultural es lo único capaz de dejar huellas imperecederas en la historia de la humanidad.

En Latinoamérica tenemos a grandes artistas, a muralistas como Siqueiros, Rivera, Orozco, en la pintura, así en la poesía tenemos a gigantes como Roque, Cesar Vallejo, Neruda, Nicolás Guillén, en la narrativa a García Márquez, Asturias y en nuestro medio local tenemos a importantes pintores, dramaturgos, actores teatrales, buenos músicos, cantantes, escultores, poetas, narradores, pero adolecemos de un público educado para ello y es ahí donde debemos focalizar y solicitar a los encargados de SECULTURA y a la empresa privada mayor apoyo a la producción y promoción al arte popular.

Personalmente, apoyado por el Teatro Universitario y por el Grupo Teatral Gato de Santa Ana, hemos llevado obras a varias comunidades, algunas de ellas de mi producción y otras de producción colectiva y lo bueno es que nuestro pueblo además de disfrutarlas me preguntan: cuándo van a venir los gatos otra vez, cuando va a venir el teatro de la U, cuándo vamos a hacer otra actividad artística y ello es lo que me empuja a seguir, la alegría e integración de nuestro pueblo a la producción, la dicha de ver a nuestra infancia actuando en cualquiera de las bellas artes.

La crítica artística es necesaria para análisis académico post producción, pero durante el proceso de creación y de montaje, el artista tiene que adaptarse a las condiciones del medio y dejar la crítica en manos de la audiencia quien será la que decida el valor objetivo de la obra de arte ya que la madurez artística o0 sea el producto terminado lleva en si y para si diferentes ejercicios de producción, repetición, corrección hasta entregar la obra que jamás será un producto terminado ya que la significación de la misma será la resultante no sólo del fenotexto que la produjo, sino de los intertextos y para textos que resulten de las diferentes lecturas de la misma.