San Salvador, El Salvador, 18 de marzo de 2015 (Prensa MPPRE).-
La Embajada de la República Bolivariana de Venezuela en El Salvador
solicitó formalmente un derecho de respuesta (réplica) al periódico
salvadoreño El Diario de Hoy, por su editorial del día lunes 17 de marzo
de 2015, el cual dicha Misión Diplomática califica que “atenta contra la
integridad y la dignidad del Estado, Gobierno y Pueblo de la República
Bolivariana de Venezuela”.
Respetando
en todo momento la libertad de expresión y prensa, la misiva entregada
al periódico salvadoreño señala que la nota editorial “tiene
imprecisiones, valoraciones sin sustento alguno y adjetivaciones
negativas contra la institucionalidad venezolana, sus autoridades
legítimamente electas y los dirigentes de los entes estatales“.
A continuación el texto íntegro de la carta enviada al Diario de Hoy de El Salvador:
Con
apego absoluto a los principios de independencia, igualdad entre los
Estados, libre determinación y no intervención en asuntos internos,
solución pacífica de los conflictos internacionales, cooperación,
respeto de los derechos humanos y solidaridad entre los pueblos en la
lucha por su emancipación y el bienestar de la humanidad, todos
consagrados en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela
en su artículo 150, el cual también establece que nuestro país mantendrá
la más firme y decidida defensa de estos principios y de la práctica
democrática en todos los organismos e instituciones internacionales;
invocando el artículo 6, parágrafo 5, de la Constitución Nacional de la
República de El Salvador, el cual expresa que “se reconoce el derecho a
respuesta como una protección a los derechos y garantías fundamentales
de la persona; considerando esta Misión Diplomática como una persona
jurídica representante de la República Bolivariana de Venezuela y, por
tanto, “agente diplomático”, figura jurídica del derecho internacional
protegida por el artículo 29 de la Convención de Viena sobre Relaciones
Diplomáticas que garantiza que el Estado receptor “tratará con el debido
respeto y adoptará todas las medidas adecuadas para impedir cualquier
atentado contra su persona, su libertad o su dignidad”; y anteponiendo
nuestro total e inequívoco respeto a las libertades de expresión y de
prensa que establecen la normativa jurídica internacional; manifestamos
en nombre de la República de Bolivariana de Venezuela nuestro más firme
rechazo al texto periodístico titulado “Apalear y asesinar a opositores no es “asunto interno” de un país”, publicado el pasado martes 17 de marzo de 2015, en las páginas de opinión del Diario de Hoy, sección Nota del Día.
Al
no aparecer firma alguna y presentándose como nota editorial central
del diario, puede concluirse que dicho texto resume la postura política
del Diario de Hoy
y, por lo tanto, nos permitimos señalar que dicha publicación atenta
contra la integridad y la dignidad del Estado, Gobierno y Pueblo de la
República Bolivariana de Venezuela.
Asimismo,
la nota tiene imprecisiones, valoraciones sin sustento alguno y
adjetivaciones negativas contra la institucionalidad venezolana, sus
autoridades legítimamente electas y los dirigentes de los entes
estatales.
Es
una total y absoluta mentira que en Venezuela nuestros connacionales
están siendo “perseguidos, apaleados, amordazados y asesinados”.
Coincide en ese aspecto la visión editorial del Diario de Hoy
con la campaña mediática global contra el Gobierno Bolivariano, la cual
sostiene la infamia de involucrar al Estado venezolano y sus dirigentes
al narcotráfico internacional, hecho que no es verdad ni existe prueba
alguna al respecto. Tampoco hay evidencia de lo que comunican como un
hecho, al referirse a “vuelos a África” y “caravanas que cruzan el
Sahara” para “inundar de droga países europeos”.
Venezuela,
su gobierno y sus demás instituciones han apelado al diálogo, no sólo
ahora sino también en momentos del pasado reciente. Ha sido la derecha
no democrática del país la que no ha querido involucrarse en los
procesos de entendimiento que ha propiciado el Ejecutivo Nacional, pues
ello va en contra de su estrategia de desestabilización y Golpe de
Estado continuado, lo cual han llevado a cabo desde el propio inicio de
la Revolución Bolivariana.
También
es un exabrupto y una ligereza referirse a Petrocaribe como un
“mecanismo de infiltración del comunismo en sociedades pacíficas”,
cuando en realidad se ha constituido como una herramienta efectiva para
la integración regional y el desarrollo social y económico de los
pueblos que la conforman, algo que ha sido reconocido por la Comunidad
Internacional en su conjunto.
Por
último, su texto apela a la más elemental y ya poco persuasiva
estrategia retórica de establecer una desproporcionada comparación entre
el Gobierno Bolivariano de Venezuela con dictaduras fascistas del
pasado o movimientos extremistas del presente, cuando en realidad somos
una Patria de Paz que ha decidido tomar las riendas de su propio destino
y asumir un camino político que ha sido legitimado en 18 de 19 procesos
electorales durante los últimos 16 años.
Es
mentira que nuestra democracia se utiliza como una “licencia para matar
y someter a los pueblos” o que apelamos a nuestra legitimidad
democrática para “pasar por encima de derechos y libertades
fundamentales”, mucho menos para proveer de “salvoconductos a ladrones,
narcotraficantes, pandilleros, fanáticos, funestos depravados ni a nada
proveniente de la escoria humana”.
Al
contrario, son los gobiernos imperiales los que ocultan sus
instrumentos de explotación y sus malévolos mecanismos de preservación y
protección de los intereses de las clases poderosas, las que apelan a
las formas más oscuras de sometimiento de la población y de violación
sistemática de los derechos humanos, delitos en los que sí ha incurrido
la derecha no democrática y algunos de sus dirigentes en Venezuela y que
les ha costado, siempre apegados a las leyes y al respeto a la
integridad, la imputación jurídica correspondiente.
Venezuela
no es una amenaza para nadie. Venezuela es un país de Paz, el cual se
encuentra en estos momentos bajo una verdadera amenaza de guerra, en la
que los medios de comunicación privados de todo el mundo se han sumado
como representantes de la derecha global que han visto en peligro sus
intereses ante un Pueblo que ha asumido el control de sus recursos y un
Gobierno que ha garantizado durante los últimos 16 años, en palabras de
Simón Bolívar, la mayor suma de felicidad posible para sus ciudadanas y
ciudadanos.
Por
todo lo antes expuesto, en respeto a la libertad de expresión y de
prensa, pero también al derecho de respuesta consagrado en la
Constitución de este país al cual respetamos profundamente, señalamos
nuestra inconformidad con el editorial del día 17 de marzo de 2015 y exhortamos al respeto de la institucionalidad venezolana y su Pueblo.
Atentamente,
Nora Uribe Trujillo
Embajadora de la República Bolivariana de Venezuela en El Salvador
(Prensa/Embajada de la República Bolivariana de Venezuela en El Salvador)
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Antonio Núñez Aldazoro
Consejero (Educación, Cultura y Comunicación)Embajada de la República Bolivariana de Venezuela
Calle Maquilishuat. No. 28. Colonia Maquilishuat, San Salvador.
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Antonio Núñez Aldazoro
Consejero (Educación, Cultura y Comunicación)Embajada de la República Bolivariana de Venezuela
Calle Maquilishuat. No. 28. Colonia Maquilishuat, San Salvador.
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