Podemos afirmar con razón que el interés a las
modalidades deportivas de invierno en el mundo iberoamericano va
creciendo en los últimos años. Muestra de ello es cada vez mayor el
número de los países participantes de las olimpíadas blancas. En la
presente, vigésimo segunda edición de los Juegos de Invierno, los países
del habla portuguesa, Brasil y Portugal, tendrán diez y dos atletas,
respectivamente.
Las delegaciones de los países de habla
hispana en los Juegos de Sochi suman un total de cuarenta deportistas
que representan a ocho naciones: España, Argentina, Chile, Venezuela,
México, Perú, Paraguay y Puerto Rico.
Para que ustedes
tengan una idea del nivel competitivo de los deportistas olímpicos del
habla hispana les recordaremos que en toda la historia de los Juegos de
Invierno hubo solo dos medallas en el palmarés de esos países, mejor
dicho, de uno, que es España.
Fue en 1972 cuando el
madrileño Francisco Ochoa hizo historia al ganar el oro en los Juegos de
Sapporo en la prueba de slalom. Veinte años más tarde, su hija Blanca
subió al podio en Albertville 1992 para recibir la medalla de bronce en
supergigante.
En Sochi España tiene todo para aumentar
su colección de medallas olímpicas. Su principal apuesta es el patinador
Javier Fernández, bronce en el pasado mundial y bicampeón de Europa: se
coronó campeón continental por segunda vez en enero pasado en Budapest.
La
delegación de España en Sochi será la más numerosa en la historia de su
participación en los Juegos Olímpicos, con veintiún integrantes,
dieciséis en deportes de nieve y cinco en disciplinas de hielo.
La
mayor representación entre los países de habla hispana de Las Américas
tendrán Argentina y Chile: ambas con siete deportistas, seguidas por
Perú, con tres, Venezuela, con uno, al igual que México, Paraguay y
Puerto Rico.
Si para la mayoría de los deportistas
latinoamericanos la Olimpíada de Sochi será su primera competición a tan
alto nivel, para el mexicano Hubertus von Hohenlohe serán sus sextos
Juegos. El 2 de febrero el esquiador mexicano que compite en slalom
cumplió cincuenta y cinco años.
Hace unos días hablamos
sobre las opciones de ese deportista en Sochi con el embajador de México
en Rusia, Rubén Beltrán, en una reunión del diplomático con la prensa:
—Bueno,
por lo menos vamos a tener a un esquiador mexicano, de ascendencia creo
que es austriaca, Hohenlohe. Ya dijo que aspira ganar la medalla “Al
mejor traje”. Entonces, es muy curioso, porque tiene un traje como de
mariachi. Ya le han explicado que Sochi no es “Miss Universo”, no hay
primer premio al traje típico, pero bueno.
He
aquí la foto: el traje de Hubertus Hohenlohe para esquiar. ¡Por favor!
¿Qué le podemos dar nosotros? ¿La medalla al deportista de mayor edad?
Cincuenta y cinco años tiene. Medalla de oro “A la persistencia”, ¿no?
Claro
que el embajador Beltrán decía todo eso en broma. Sin embargo, el
propio esquiador mexicano, número 26 en la categoría de slalom en su
debut olímpico en Sarajevo en 1984, percibe con orgullo la posibilidad
de representar a México en la justa de Sochi:
—Es
mucho orgullo y responsabilidad porque somos cien millones de
habitantes y a lo mejor la única chance que tenemos es la mía. Pero yo
creo que no hay que mirarlo así: hay que mirarlo de que soy un embajador
de este país, soy un embajador con, digamos, un estilo de vida y una
fuerza humana, que va más allá del resultado que puedo obtener.
Dijo
el veterano olímpico mexicano en una entrevista con la CNN en español
en la que también explicó qué supone para él competir en Sochi luciendo
un traje original, más propicio para un espectáculo:
—Soy
alguien que, cuando va sobre el escenario, cuando participa, también
piensa en las cosas menos importantes, pero que también al final dan un
sabor y venden un país, venden una imagen y venden una historia, porque
creo, como esquío yo, no voy a crear tanto interés y tanta noticia para
México. Pero eso es importante, que México esté allí delante y que la
gente realmente lo valore.
La participación de
México en los Juegos Olímpicos de Sochi va mucho más allá de lo que
consiga el esquiador veterano Hubertus von Hohenlohe, pues gracias a
México millones de televidentes podrán seguir las competiciones de esta
Olimpíada.
La compañía América Móvil del magnate
mediático mexicano Carlos Slim compró los derechos de transmisión de los
Juegos de Sochi en televisión abierta a través de Canal 22 y UnoTV, que
a su vez formalizaron en noviembre pasado los pertinentes acuerdos con
América Móvil.
Los profesionales mexicanos de
televisión se sienten felices de poder transmitir los Juegos de Sochi,
pero algo más de la Olimpiada 2014. De eso habló Rafael Tovar y de
Teresa, presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes:
—Creo
que esto es una gran novedad de temas culturales, de una, podemos
llamar, Olimpiada cultural en la que la gran cultura rusa, la gran
cultura de su literatura, de su música, de su pintura, de su
pensamiento, estará presente y será un momento en que también pueda
difundirse.
El director general de UnoTV, Arturo
Elías Ayub, también se mostró seguro de que los derechos de transmitir
los Juegos de Sochi suponen mucho más que mostrar un puro deporte:
—Lo
que les puedo adelantar es que claro que habrá entretenimiento, claro
que habrá deporte, pero de verdad les vamos a subir varias rayitas al
nivel cultural, educativo, de lo que hemos visto siempre en este tipo de
eventos.
El embajador de México en Rusia, Rubén
Beltrán, apreció altamente el papel de las compañías de televisión
mexicanas que realizarán la cobertura informativa de los Juegos
Olímpicos de Sochi, donde ya están trabajando más de cuarenta
profesionales mexicanos:
—Que
unas compañías mexicanas —Canal 22 y UnoTv— vengan acá, es uno de los
rasgos de un México global, de un México que cada vez está más metido en
los grandes temas que tienen que ver con el transporte, con la
comunicación, con la política, con las finanzas... Y para nosotros sí es
muy motivo de orgullo, y hemos estado aquí con los colegas de Canal 22 y
otros, que vengan, y utilizar la oportunidad de que México y
Latinoamérica, por cierto, conozcan más de Rusia.
Hemos
estado platicando con ellos, los hemos llevado a comer a algún
restaurante ruso y platicarles un poco de estas fantásticas tradiciones
que hay en este país.
Entonces,
es una triple oportunidad. Primero, la oportunidad que las empresas
mexicanas hagan más negocio. Segundo, que el nombre de México a través
de sus empresas sea más conocido en Rusia. Y tercero, que la interacción
cultural entre México, Latinoamérica y Rusia se fomente. Y que México
sea el nudo a través de que pasa, me parece fantástico.
Y
un último detalle. La cadena ESPN llegó a un acuerdo con la mexicana
América Móvil para emitir la señal televisiva de los Juegos de Sochi,
con lo cual puede aumentar en flecha el número de quienes podrán ver en
Latinoamérica las competiciones de la Olimpíada Blanca.
El
acuerdo con América Móvil incluye derechos, no exclusivos, digitales y
de televisión de paga para los Juegos de Sochi 2014, en diecisiete
países de Latinoamérica, sin contar con Brasil, Cuba y Puerto Rico.
Así
que, el esfuerzo colectivo de las compañías de televisión mencionadas,
hace posible que el público hispanohablante de Latinoamérica pueda ver
los Juegos Olímpicos de Sochi en toda su plenitud, desde el 7 de febrero
y hasta el día de su clausura, el 23 de este mes.
vs/as/sm
Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción de La Voz de Rusia.
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