Foto: RIAN
En
los Juegos Olímpicos y Paraolímpicos de Sochi trabajarán más de
veinticinco mil voluntarios de sesenta países del mundo, que fueron
seleccionados de más de doscientos mil candidatos. Todos ellos han
tenido una buena capacitación, muchos ya se han ganado muy buena
reputación laborando en importantes eventos internacionales. Los
voluntarios de Sochi-2014 han trabajado en competencias de prueba, en
los Juegos Olímpicos de Vancouver y Londres, durante los Juegos
Universitarios Mundiales de verano, en la ciudad de Kazán, en el
Campeonato Mundial de Atletismo, en Moscú.
Ahora
tendrán que mostrar de lo que son capaces, en la primera Olimpiada de
invierno en la historia de Rusia, para la que queda menos de tres
semanas. Vladimir Putin procuró enfocar a los voluntarios en el trabajo
que les espera. Ya que de ustedes depende el ambiente en los Juegos, les
aleccionaba el jefe del estado ruso.
–Quiero
desearles sinceramente éxito y fuerzas, puesto que los Juegos Olímpicos
y Paraolímpicos requerirán de una gran entrega de parte suya y tienen
que estar preparados para ello. Es una fiesta para los participantes y
visitantes, mientras que para ustedes en primer lugar es trabajo. Quiero
predisponerlos precisamente en este sentido.
El
movimiento voluntario en Rusia es muy reciente. Por primera vez se
pusieron a pensar seriamente en la preparación de ayudantes voluntarios
en 2007, cuando Rusia se ganó el derecho de recibir la Olimpiada
invernal en Sochi. Entonces la legislación rusa determinó el término
“voluntario de los Juegos”, lo que permitiera otorgar el status oficial
al movimiento olímpico de voluntarios. En 2010, en veintiseis centros
rusos de enseñanza superior se crearon centros de voluntariado, que se
dedicaron a seleccionar y capacitar a los voluntarios para los Juegos y
otros importantes eventos internacionales.
Durante
el encuentro con el presidente los voluntarios le hicieron preguntas
más diversas: de las cualidades que debe tener un político, qué será de
los centros de voluntarios después de los Juegos en Sochi, y qué opina
el presidente acerca de fomentar el voluntariado social. Una chica
formuló, a solicitud de sus colegas extranjeros, la pregunta relativa al
uniforme de los voluntarios. “¿Cómo resultó que, teniendo una ley que
prohíbe la propaganda del homosexualismo, el uniforme de los
voluntarios, su gama de colores, sea de arcoíris?” preguntó esa
participante del encuentro.
Vladimir
Putin señaló que no fue él quien diseñó el uniforme y agregó que en
Rusia no estaban prohibidas relaciones sexuales no tradicionales.
–No
prohibimos nada y no agarramos a nadie. No tenemos prevista
responsabilidad por ese tipo de relaciones, a diferencia de otros países
del mundo. En particular, en algunos estados de los EEUU está
establecida responsabilidad penal por relaciones homosexuales. Por eso
aquí pueden sentirse tranquilos, a gusto, pero por favor, dejen en paz a
los niños.
El
encuentro del presidente con los voluntarios se celebró en el centro
deportivo Laura, en el clúster montañoso. Ahí muy pronto empezarán a
disputar las preseas olímpicas los esquiadores y biathlonistas más
fuertes del planeta. Por cierto, Vladimir Putin quisiera asistir durante
los Juegos, a las competencias de esquí de fondo, biathlón, esquí
alpino, hockey y patinaje artístico. Si se lo permite, desde luego, su
horario de trabajo, agregó el presidente.
Los
voluntarios, a su vez, prometieron hacerlo todo para que los Juegos en
Sochi sean los mejores en la historia del movimiento olímpico. “No le
fallaremos”, le prometieron al presidente.
radio/sk/ll
Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción de La Voz de Rusia.
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