Papa Francisco
1 de septiembre de 2013.- El papa Francisco rechazó hoy las guerras y
exhortó a todas las partes a poner fin a las hostilidades y buscar la
paz en Siria, al pronunciar el Angelous, en la Plaza de San Pedro del
Vaticano, ante miles de fieles.
“No más guerras. Nunca el uso de la violencia lleva a la paz, la guerra llama a la guerra, la violencia llama a la violencia”, consideró el Sumo Pontífice, en medio de los preparativos de Estados Unidos y otras potencias occidentales de una agresión contra Damasco.
“La humanidad necesita ver gestos de paz”, subrayó Jorge Mario Bergoglio, quien en otras ocasiones rechazó cualquier acción bélica contra el Estado levantino.
El Obispo de Roma llamó a las partes enfrentadas en Siria a no cerrarse en sus propios intereses, sino emprender con coraje y decisión el camino del encuentro y de la negociación, superando el ciego enfrentamiento, apuntó.
Bergoglio afirmó que decidió convocar a toda la Iglesia para el próximo día 7, víspera de la Natividad de María reina de la paz, a una jornada de ayuno y de oración por la concordia en Siria, en el Levante y en el mundo entero.
El jefe de la Iglesia católica se refirió al sufrimiento y la destrucción que conlleva el uso de las armas, especialmente, entre la población más débil.
No es la cultura del enfrentamiento y del conflicto lo que construye la convivencia entre los pueblos, sino la del encuentro y diálogo. Este es el único camino para la paz, subrayó.
El Sumo Pontífice condenó con particular firmeza el uso de armas químicas, en alusión al ataque registrado en las afueras de Damasco, el pasado 21 de agosto, del cual Washington intenta responsabilizar al gobierno sirio, mientras éste culpa a la oposición armada.
“No más guerras. Nunca el uso de la violencia lleva a la paz, la guerra llama a la guerra, la violencia llama a la violencia”, consideró el Sumo Pontífice, en medio de los preparativos de Estados Unidos y otras potencias occidentales de una agresión contra Damasco.
“La humanidad necesita ver gestos de paz”, subrayó Jorge Mario Bergoglio, quien en otras ocasiones rechazó cualquier acción bélica contra el Estado levantino.
El Obispo de Roma llamó a las partes enfrentadas en Siria a no cerrarse en sus propios intereses, sino emprender con coraje y decisión el camino del encuentro y de la negociación, superando el ciego enfrentamiento, apuntó.
Bergoglio afirmó que decidió convocar a toda la Iglesia para el próximo día 7, víspera de la Natividad de María reina de la paz, a una jornada de ayuno y de oración por la concordia en Siria, en el Levante y en el mundo entero.
El jefe de la Iglesia católica se refirió al sufrimiento y la destrucción que conlleva el uso de las armas, especialmente, entre la población más débil.
No es la cultura del enfrentamiento y del conflicto lo que construye la convivencia entre los pueblos, sino la del encuentro y diálogo. Este es el único camino para la paz, subrayó.
El Sumo Pontífice condenó con particular firmeza el uso de armas químicas, en alusión al ataque registrado en las afueras de Damasco, el pasado 21 de agosto, del cual Washington intenta responsabilizar al gobierno sirio, mientras éste culpa a la oposición armada.
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