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El Papa Francisco quiere que la Iglesia se adapte a las redes sociales para conseguir que los fieles se sientan cercanos a la institución. En una publicación reciente de La Sagrada Penitenciaría Apostólica se ha hecho oficial que se concederán “indulgencias plenarias” a través de Twitter.
Las personas que deseen disfrutar de este privilegiado perdón tendrán que hacerse seguidores de la cuenta del Papa en esta red social, además de asistir a los eventos que se celebrarán con motivo de las Jornadas Mundiales de la Juventud en Brasil. Para aquellas personas que no puedan acudir al evento se ha especificado que también es posible seguir las misas y demás celebraciones religiosas a través de Internet o la televisión. También se ha recalcado que los fieles tendrán que asistir a misa y haberse confesado antes de obtener esta indulgencia.
La iniciativa no ha tenido una buena acogida por todos los sectores del clero. Son muchas las personas vinculadas a la Iglesia que no han visto en este anuncio una buena iniciativa. “Aleja al sacerdote de las personas, único intermediario entre Dios y el hombre”, ésta es una de las críticas más frecuentes con la que se ha encontrado la nueva idea del Papa Francisco. Claudio María Celli, presidente del Pontífico Consejo para las Comunicaciones Sociales, ha añadido que “no se pueden obtener indulgencias como el que compra un café de máquina”. Celli también comentó que “no basta con haberse confesado, ir a misa y seguir las Jornadas a través de un ‘streaming’ ya que son solo dispositivos. Lo importante es que el tuit que publique el Papa produzca un fruto espiritual genuino en el corazón de las personas que lo reciban”.
La cuenta oficial del Papa Francisco es Twitter es @Pontifex, y ya cuenta con más de dos millones y medio de seguidores. También se puede seguir desde la cuenta oficial que el Pontífice tiene en español, @Pontifex_es, y que siguen más de tres millones de personas.
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