Atrévete a ser libre. A volar como águila solitaria o como bandada de pájaros
escapada de la jaula, atrévete a desafiar la imposición vertical venga de donde
venga, abre las alas de tu imaginación a nuevos horizontes y hazla chocar contra los muros de la
corrupción reinante a lo largo de la tierra.
Cumple con tu destino, los seres humanos no
nacemos corruptos, nos corrompe el sistema, lucha por destruirlo y de sus
cenizas, ilumina la utopía de tu vida. Tampoco nacemos
esclavos, es la propiedad privada quien nos esclaviza, destrúyela.
No te
equivoques, no es la empresa privada la que produce riquezas, sino lo
trabajadores, entonces lucha porque la riqueza producida por los obreros y los
campesinos sea distribuida de acuerdo a tu capacidad y tu trabajo. Destruye las
tesis económicas propuestas por gente que jamás ha producido, es fácil escribir
desde la comodidad del Faculty Club, pregúntate primero qué haría la humanidad sin el esfuerzo obrero-campesino y ahí
encontraras las respuestas a la problemática de distribución de bienes.
En términos de
participación en las luchas de los pueblos tienes que conocer los por qué y las condiciones objetivas y subjetivas del proceso. Un ciego no
se cae por segunda vez por ciego, sino por ignorancia, entonces estudia,
aprende, comparte y enseña a los que no saben los que tu sabes, no creas que
por ello los demás son ignorantes, los pueblos tienen la sapiencia ancestral
que no se enseña en aulas, tienen la enseñanza de la escuela de la vida.
El objetivo de
la vida es la felicidad. Da vida a tus
años y no años a tu vida, busca la felicidad en la fraternidad y en tu entrega
al bienestar colectivo, ello hará de tu vida una vida verdadera y dejará tu marca al paso por la tierra.
Paul Fortis
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