Sólo personas ciegas o mal intencionadas no pueden estar de acuerdo con Mauricio por su discurso en El Mozote el reciente 16 de enero cuando se celebraban los Acuerdos de Paz y donde se comprometió a ordenar una revisión de la historia de las fuerzas armadas salvadoreñas y su actuación durante la guerra civil de El Salvador.
Algunos militares gritan que se revise la actuación de la guerrilla, para ello hay que ver primero quiénes causaron la guerra, cuáles eran sus objetivos y las resultantes esperadas a lo que el pueblo organizado respondió con la guerra revolucionaria, obligado a defender su vida usando los métodos populares de auto defensa.
Para no dar juicios subjetivos, he platicado con compañeros y compañeras de la Dirección del FMLN, con diplomáticos, con salvadoreños en el extranjero, con personas de todos los estratos sociales de nuestra sociedad y todos están de acuerdo en decir que Mauricio ha hecho historia, no sólo para El Salvador, sino para el mundo.
Las tareas de las fuerzas armadas de El Salvador están bien detalladas en la Constitución Política de la nación y no hay donde equivocarse, pero son inhumanos, perversos y psicópatas los que creen que las tareas de las fuerzas armadas sea el exterminio del pueblo.
Felices de aquellos que no han sufrido las inhumanas actuaciones de los militares que convertidos en escuadrones de la muerte han asolado a nuestra ciudadanía: Para recordar el estado psicológico del pueblo y mío les regalo estos párrafos de mi poemario Confesionario
Las noches fueron largas, inmensas y angustiosas
La continua y desgarradora espera
El chirriar de una hoja tirada por el viento
Terminaba con tus nervios ya destruidos y veías
Que las sombras sangrientas se acercaban
Con los hierros de muerte desenvainados
y las caras asesinas cubiertas con mortajas
Como queriendo tapar con un sucio pañal
Los crímenes históricos del siglo que de ninguna manera
Fue para nosotros el siglo de las luces ya que las únicas
Eran las que describían las balas trazadoras en su vuelo mortuorio.
Hacían el trabajo sucio para el que se habían preparado
En la anti- dialéctica escolástica del norte
Cumpliendo bien el deber recibiendo millones
Y condecoraciones por el trabajo continuado y por
El corto número que iba quedando sin respirar detrás
De aquellas puertas y puertos de ignominia.
II
Tod@s tuvimos una noche a tod@s
Nos regalaron una sin que la pidiéramos
Ahora me pregunto: cómo fue tu noche?
Fue la noche de los ojos abiertos y las pupilas húmedasLa noche del llanto infantil y la lluvia de voces, la noche
Transformada en la eternidad de la agonía que se adueñó
De toda aquella miserable vida.
Podría escribir un largo artículo sobre la actuación del Señor Presidente, basten esas tus estrofas para darle la razón y felicitarlo por su valentía humanística que ante los ojos del mundo ya es parte de nuestra historia.
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