Para celebrar la Memoria de Schafik hay que entregarse a la lucha por el bienestar de nuestro pueblo como él lo hizo todos los días de su heroica vida. No baste decir Schafik felicidades en tus 81 años y dejarlo hasta ahí, ello no es lo suficiente ni nada será suficiente, sino nuestra entrega incondicionalidad a las luchas de nuestro pueblo.
Desde acá de Farabunterra te escribimos, estamos jodidos, pero no decaídos y quienes heredamos tu bandera estamos empujando el tren de nuestra historia a sabiendas que el puerto está lejano, pero existe y tenemos la seguridad que llegaremos.
Celebramos permanentemente tu memoria siendo honestos, transparentes, entregados sin esperar nada que no sea la paz y la justicia social. Poco a poco la semilla va germinando y nuevas plantas crecen en el jardín que tú ayudaste a plantar.
Ah Viejo León Palestino! Tus enseñanzas han quedado prendidas en las calles, son como retratos hablados clavados en nuestra conciencia, estampas de días gloriosos de lucha por nuestra libertad.
Desde acá te escribimos y sabemos que nuestras cartas llegan a miles de receptores en el alma de los pueblos. Son tambores de guerra anunciando nuestras luchas patrióticas, Latinoamérica se une y como leona herida empuja a sus cachorros hacia el sol de la victoria definitiva.
Con gran orgullo cuscatleco te escribo mis cartas. Con mis imperfecciones y sin pretensiones, con humildad y fraternidad
revolucionaria para que nadie olvide que la tarea esta inconclusa, que las revolución jamás será un proyecto terminado y que por lo tanto tenemos que luchar con ahínco e incondicionalidad por la justicia y la paz en nuestra patria, que jamás podremos estar quietos mientras hayan niños muertos de hambre y mujeres ultrajadas y la riqueza nacional no sea para todos, mientras ello suceda seguiremos en pie de lucha hasta que cada salvadoreño tenga un techo, una escuela que le enseñe a amar y a respetar a sus congéneres, así como tú lo hiciste con el pueblo que te ama, te respeta y te vive.
Por siempre en pie de lucha.
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