El mes de abril tiene un significado histórico para Venezuela en el cual el pueblo venezolano con su valentía y heroísmo demostró su deseo de libertad e independencia. En 1810 hace 201 años en la ciudad de Caracas dentro de la ola libertaria que sacudía las Américas, los sectores populares desafiaron al imperio español y destituyeron al capitán general Vicente Emparan en un cabildo abierto iniciando el proceso de declaración de independencia. Esta acción por parte del pueblo, abrió el camino a la firma de la independencia de Venezuela que se concretaría casi un año después el 5 de julio de 1811. El deseo de libertad de los pueblo siempre es enfrentado por sectores reaccionarios e imperiales por lo que a pesar de ello, el pueblo venezolano no ha cesado en su lucha. La sangre del pueblo ha teñido los campos de batallas y Venezuela bajo la guía del libertador Simón Bolívar no ha claudicado en la lucha por lograr la independencia pasando por muchos momentos tanto de victorias como de fracasos.
El legado del 19 de abril está latente y después de casi doscientos años el pueblo venezolano nuevamente en un mes de abril demostró en el campo de combate su decisión de no doblegarse frente a la opresión y dominio extranjero. El 11 de abril de 2002 las fuerzas de la reacción y el imperialismo realizaron una operación de golpe de estado que buscaba impedir el avance de la revolución bolivariana dirigida por el comandante Hugo Chávez Frías. Después de lograr la aprobación de una nueva constitución y un conjunto de leyes que tocaban intereses de la burguesía venezolana y el imperialismo norteamericano las fuerzas de la reacción ejecutaría una acción criminal que implicó la masacre de venezolanos y venezolanas con el objetivo de sacar del poder al pueblo y al presidente Chávez.
Esta acción que fue orquestada lo las gremiales de la empresa privada encabezada por FEDECAMARA, los sectores mafiosos-sindicalistas de la CTV, los medios de comunicación de derecha, la cúpula de iglesia católica, sectores fascista de las Fuerzas Armadas Nacionales de Venezuela, los partidos de derecha y por supuesto dirigidos por el gobierno de EEUU. Acción que fue concretado con la captura del comandante Hugo Chávez y derrocamiento de su gobierno. No contaban estos conspiradores con la capacidad de reacción del pueblo venezolano y de los sectores patrióticos de FAN de Venezuela. El 11 de abril, a pesar de resistencia del pueblo por impedir la acción golpista esta se concretó. Las fuerzas populares del pueblo se reorganizaron y a pesar de no contar con armas, pero si con la voluntad de lucha; se enfrentó en las calles de las principales ciudades de Venezuela a la acción de los fascistas y Caracas dio el ejemplo como dice la estrofa del himno nacional de la República Bolivariana de Venezuela. Convirtió sus calles en escenario épico al igual de los campos de batalla de la época de la independencia contra el imperio español, el pueblo venezolano combatió los días 11, 12 y 13 hasta lograr derrotar a los golpistas y junto al ejército venezolano rescataron al comandante Chávez y restituyeron el orden constitucional. En apenas dos días de gobierno del títere puesto por la derecha y el imperialismo, el señor Pedro Carmona y su gobierno fascista desataron una ola de represión contra el pueblo violando todos los derechos humanos demostrando con ello las intenciones de ahogar a sangre y fuego el anhelo de libertad del pueblo venezolano.
Después de 9 años de esta gesta histórica las aspiraciones de la derecha y del imperialismo no se han detenido y siguen en su afán de impedir los procesos de cambio en Venezuela, América Latina y el mundo, pero también después de nueve años el saldo de la decisión de continuar la revolución bolivariana es ejemplar. Venezuela ha logrado avanzar en su dignificación como pueblo mejorando las condiciones de vida de su población reduciendo la pobreza, reflejo de ello; son los avances en las áreas de la educación, la salud y la economía, además del ejercicio soberano del pueblo con el ejercer de la democracia participativa consolidando el camino en la construcción de una sociedad socialista, lo que constituye un ejemplo a imitar por otros pueblos que siguen junto a Venezuela y construyen un camino de cambio fuera del dominio imperial.
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