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| Obama en la tumba de una de las millones de victimas de criminales como él |
El presidente de Estados Unidos (EE.UU.), el premio nobel del crimen Barack Obama, tuvo la desfachatez y el descaro de visitar, durante su estancia en El Salvador, la tumba del arzobispo salvadoreño Óscar Arnulfo Romero, en medio del rechazo y de varias protestas de la población que responsabiliza al Gobierno norteamericano de la muerte del sacerdote y luchador por los derechos de los pobres.
La tumba está localizada en la catedral de San Salvador en el centro de la capital, y el jefe de los criminales estuvo acompañado del presidente salvadoreño Mauricio Funes, antiguo guerrillero que hoy coquetea y mancha la memoria historica de su pueblo con los que siempre masacraron y saquearon a la poblacion salvadoreña.
Por supuesto que, mientras los politicos olvidan, el pueblo no, y la visita del lider terrorista estadounidense a la tumba de Romero provoco que miles de trabajadores se movilizaran a las calles en rechazo a este gesto, ya que el sacerdote fue asesinado por Ejército salvadoreño tras la formación y las ordenes de Washington.
”Lo indignante es lo que el representa, está representando al Gobierno que prácticamente mató a Monseñor Romero”, declararon algunos de los manifestantes, mientras otro afirmaba que "No estamos de acuerdo con que Obama piense venir aquí como si nada, cuando está haciendo guerra en Libia, cuando el Gobierno de Estados Unidos financió la guerra aquí en El Salvador”.
La visita se realizó dos días antes de que se conmemoren 31 años del asesinato del Arzobispo. El 24 de marzo de 1980 un francotirador de los escuadrones de la muerte le disparó al corazón cuando oficiaba una misa en una pequeña capilla de un hospital para enfermos de cáncer en la capital. Claro que para la EE.UU. y la CIA defender los derechos humanos es todo un delito inaceptable, pues supone ponerse enfrente de la habitual violencia criminal de este pais.
Un informe de la Comisión de la Verdad de Naciones Unidas creada poco después de los acuerdos de paz que pusieron fin a la guerra civil salvadoreña en 1992, determinó que el mayor Roberto D’Aubuisson, que murió de cáncer en 1992, fue el autor intelectual del asesinato de Romero y fundador de los escuadrones de la muerte, responsables de cientos de asesinatos durante la guerra civil.
Sin embargo, los responsables del magnicidio no serán castigados debido a una amnistía promulgada por el gobierno del presidente Arena, horas antes que fuese divulgado el informe de la Comisión en 1993 ¿Curioso, no?
fuente: Telesur
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