Para la decisión en la selección de personal idóneo, en los diferentes puestos de las carteras de estado debemos como revolucionarios respetar la decisión de los ministros, porque se supone que se realizará por un proceso democrático, y ahora no estamos de acuerdo con que el compañeros-a, a quien han minimizado, a quien lo han hecho a un lado y hasta le han vedado el derecho de expresarse verbalmente, y desempeñarse como profesional no ha podido, por su clara preferencia política de izquierda.
Será inconcebible entonces que entre personas revolucionarias, con los mismos pensamientos e ideales afines, y hasta luchas militares contra el enemigo opresor durante mucho tiempo, nos veamos en el impase, de criticar a futuras jefaturas.
Recordar que la transparencia que caracteriza a una persona comprometida con el partido, y sobre todo con el pueblo debe ser disciplinada y coherente con el quehacer en el día a día.
Un pensamiento afirma que muchas veces nos acercamos a la luz no para ver más sino para ser visto por los demás… ¡No busquemos protagonismo compañeros! El pensamiento del Ché Guevara afirma que al revolucionario lo caracteriza el amor, y comprometidos con nuestros setenta mil asesinados por el enemigo ; sabemos que el socialismo no riñe con las creencias religiosas, en un pasaje de la Biblia se afirma : “…el árbol se conoce por sus frutos…” hoy es tiempo de demostrar lo que hemos venido cultivando y deseando por años un país nuevo, de cambios, de equidad económica, de respeto, social, de oportunidades, y otros aspectos que se plasman en los derechos humano desde 1940 y que nuestros jefes detractores en compromiso con el nazismo ARENERO no los han respetado , esas personas han estado en esos puesto por más de 15 años.
Hoy, debemos ser unidos y apoyar a las personas que sean seleccionadas o designadas y que sean nuestro jefes-as. Se dice que los salvadoreños somos como los cangrejos cuando están en un balde el cangrejo que desea destacarse, los demás lo jalan pa` bajo… como cuando los ARENEROS cortaban la cabeza a quienes tenían el deseo de hacer bien las cosas y destacaban en aspectos positivos lo cambiaban de funciones y puestos, porque sólo ellos desean ser… aunque hagan las cosas al revés hoy es cuando debemos practicar valores-verbos como: Solidarizarse, apoyar, dialogar, proponer, respetar, reconocer esfuerzos, capacidades, virtudes en nuestros dirigentes, participar, comprometerse, y hacer coherente la teoría con la práctica. No practiquemos antivalores. Al revolucionario también lo caracteriza la humildad, como el obedecer lo que en consenso se decide! Como diría nuestro comandante Schafick: La lucha continúa!
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